Increíble historia El lomense Miguel Salvatierra nació con una condición congénita que lo llevó a estar mucho tiempo internado. Aprendió a leer a los 2 años para escapar del "encierro hospitalario".
Sus ganas de aprender, de informarse y de saber más sobre lo que le pasó desde su nacimiento lo llevaron al lomense Miguel Salvatierra (42) a refugiarse primero en la lectura y más adelante en la escritura de su propia autoría. Nació con una malformación congénita del sistema nervioso central que se caracteriza por la falta de cierre de la columna vertebral y el conducto raquídeo antes del nacimiento que se llama mielomeningocele.
Por esa condición, desde muy temprana edad tuvo que pasar por 52 intervenciones quirúrgicas. "Gran parte de estas operaciones fueron en mi infancia, antes de los 12 años. En la mayoría de ellas me enyesaban o inmovilizaban. Entonces, para no aburrirme, mi madre me enseñó a leer cuando tenia apenas 2 años. Desde entonces descubrí en los libros, no solamente una forma de escapar de mi encierro hospitalario, sino que también, descubrí que los libros tenían respuestas a preguntas que me hacía y los mayores que tenía alrededor, no querían o no podían responderme", detalló Salvatierra que tiene tres libros editados y muchos textos que aún no fueron publicados.
A sus 10 años tuvo que pasar por una operación muy complicada de cadera y la doctora que lo operó le recomendó que además de leer por qué no se ponía a escribir todo lo que le pasaba. "Recuerdo que escribí una especie de poema y desde ese momento descubrí a la escritura como un modo de expresar lo que me pasa, aunque no me animé a publicar hasta 2020 en plena pandemia", señaló.
Gran parte de estas operaciones fueron en mi infancia, antes de los 12 años. En la mayoría de ellas me enyesaban o inmovilizaban. Entonces, para no aburrirme, mi madre me enseñó a leer cuando tenia apenas 2 años. Desde entonces descubrí en los libros, no solamente una forma de escapar de mi encierro hospitalario, sino que también, descubrí que los libros tenían respuestas a preguntas que me hacía y los mayores que tenía alrededor no querían o no podían responderme
Sus libros guardan algo de referencia personal sobre todo en "Bitácora de una historia de mielo", donde detalla un poco que es esto de nacer bajo una condición genética. "La mielomeningocele es una condición que se genera en el feto, en el cuarto mes de gestación, por falta de ácido fólico en el organismo de la madre al gestar y en mi caso también influyeron factores genéticos y externos porque muchos ancestros tuvieron esa condición, pero como era desconocida en el ámbito rural donde vivían, morían al poco tiempo", contó. el escritor que además se recibió de abogado, pero aún no ejerce la profesión.
Dar a conocer su historia es sumamente importante para el lomense ya que aseguró que en muchos casos, como le pasó a sus padres, "las personas no tienen ni idea de la importancia de los suplementos vitamínicos o de los demás cuidados durante el embarazo".
En tanto, sus otros libros "Escritos decodificados del más allá y algunos de aquí nomás. El legado de Don Luis" y "El secreto de Arami, una historia de reencuentros" tienen que ver con la forma de ver la muerte a partir de las experiencias personales que ha vivido el autor.
SU RELACIÓN CON LA MUERTE
Entre tantas idas y vueltas en los hospitales por la cantidad de operaciones a las que tuvo que someterse, Miguel Salvatierra contó que fue declarado muerto cuatro veces, una vez tras una fiebre muy alta y las otras tres fueron tras complicaciones en las intervenciones por lo que ha experimentado lo que sucede en "el más allá".
"En tres de esas oportunidades tuve experiencias muy extrañas, en dos vi la luz y a un ancestro que me dijo 'no es tu momento de estar aquí' y me dio varias directrices de cosas que yo aún debía hacer, una de ellas era escribir y tratar de brindar una explicación sobre la muerte y otras cosas más", resaltó.
También, en una de esas casi muertes vio cómo salía de su cuerpo y veía todo lo que pasaba a su alrededor. "Vi cómo me aplicaban electroshock y mi cuerpo me absorbió nuevamente y me desperté, después cuando le decía a los médicos que había hecho cada uno en ese instante con lujos de detalles para revivirme, se miraban entre si, incrédulos", dijo sobre esos episodios que lo conectaron con esas experiencias que luego plasmó en sus libros donde trata de explicar qué es la muerte.
"Perdí personas muy queridas desde muy chico. Viví mucho tiempo en el hospital y en ese lugar la muerte siempre está cerca. Cuando es así, tenés dos opciones o temerle o tratar de entender a la muerte. Yo opté por lo segundo. La muerte es un paso más hacia otra vida, no es el fin de nada, es un descanso entre vidas. Al menos, así lo entiendo yo", declaró muy seguro sobre un lugar en el que estuvo por al menos algunos segundos.
Sobre su futuro, el escritor contó que prepara una novela que va a publicar a principios del año próximo. Respecto a su salud comentó que está estable, pero siempre debe cuidarse mucho. "Tengo temporadas que se me empiezan a complicar las cosas y es un efecto dominó", dijo.
Pero, sus ganas de seguir adquiriendo conocimientos no paran. "Comencé con la carrera de psicopedagogía en la Universidad de Lomas, pero mi cuerpo se empezó a resentir y tuve que dejar, entonces me anoté en el profesorado de educación superior y secundario de la UAI para empezar el año que viene", manifestó el escritor lomense que nada lo detiene, que desde temprana edad entendió que siempre puede haber una salida que lo libere de los dolores físicos, de las situaciones adversas que no se pueden cambiar y así seguir adelante.
Para saber más de sus libros y de su tarea como escritor seguir la cuenta: @migueleduardosalvatierralibros