NUEVA ACUSACIÓN El imputado espera ser juzgado por el gatillo fácil denunciado en 2020 en Centenario. Mientras tanto, fue denunciado por otra víctima, que recurrió a la Justicia.
El expolicía que será juzgado por el caso de gatillo fácil que casi le cuesta la vida a Ignacio Seijas, el joven baleado en la cara durante un allanamiento erróneo en su casa de Villa Centenario, fue denunciado por otro delito, mientras espera el juicio por el hecho ocurrido en junio de 2020.
La Unión tuvo acceso a la denuncia de un hombre que acusó de amenazas al exmiembro del GAD de Lomas de Zamora que sería el autor de la grave herida provocada a Nacho, quien perdió la vista de un ojo como consecuencia de ese brutal episodio de violencia institucional.
La persona presuntamente amenazada recurrió a la Justicia y formalizó la acusación en el Departamento Judicial de Mercedes, donde tramita la causa en la UFI 10 Descentralizada de Luján, a cargo de la fiscal María Laura Cordiviola.
Según el testimonio del damnificado, éste era compañero de trabajo de Daniel Antonio David. Ambos realizaban labores en el Campo Valle Verde, un centro recreativo correspondiente a la obra social de capitanes de ultramar y oficiales de la marina mercante.
En ese lugar, David habría cometido varios actos intimidatorios a la víctima, y también en la calle. "Cualquiera tiene un accidente en la calle", le habría dicho al damnificado, mientras lo seguía en auto.
EL JUICIO POR EL ATAQUE A NACHO SEIJAS
El expolicía deberá presentarse ante la Justicia el 17 de marzo para ser juzgado por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Lomas de Zamora, que estará a cargo del veredicto.
En principio, las jornadas se extenderán durante el 18, 19, 20, y 21 del mismo mes, jornadas que contarán con una ronda de testimonios y la presentación de pruebas incorporadas en la causa, previo a la decisión de los jueces.
El imputado será sentado en el banquillo de los acusados, por el grave ataque que se le atribuye, ocurrido el 20 de junio de 2020, en Rawson al 1800, en Lomas, cuando efectivos policiales, por error, entraron a la vivienda de la víctima.