A 17 AÑOS "Abrigué a mi hijo, que era muy chiquito, para que pueda salir a jugar", rememoró Anabel Vidal. Este finde gélido trajo a la memoria aquel histórico episodio.
Mediodía del 9 de julio de 2007. Los argentinos no sabían que estaban a punto de presenciar un hecho que, hasta estos días, no volvió a repetirse: debido a la presencia de aire muy frío y una precipitación fue que comenzó a nevar en la Buenos Aires, Capital y otras nueve provincias. La siguiente semana se cumplirán 17 años de aquel fenómeno meteorológico inolvidable y algunos vecinos lomenses rememoraron el momento con alguna anécdota, todos con el deseo firme de volver a ver nieve en sus casas.
"Recuerdo que empezó a nevar pasado el mediodía y duró hasta la madrugada del otro día. Yo estaba cuidando de mi nieto, que en ese momento tenía cinco años, y el papá lo había venido a buscar", empezó a contar la lomense Alixia Argentino, que rápidamente relató: "Se llenó todo el patio de nieve, fue una emoción increíble. Yo me estaba reponiendo de una quimio muy fuerte que tuve y no me animaba a salir, pero cuando vi todo blanco no lo dudé".
Se llenó todo el patio de nieve, fue una emoción increíble. Yo me estaba reponiendo de una quimio muy fuerte que tuve y no me animaba a salir, pero cuando vi todo blanco no lo dudé.
"No conocía la nieve y fue un lindo momento para disfrutarlo en familia, nos habíamos juntado a comer en la casa de mi mamá y estábamos todos que no lo podíamos creer. Abrigué a mi hijo, que era muy chiquito, para que pueda salir a jugar", se sumó Anabel Vidal para contar su experiencia, e inmediatamente acotó que "fue una locura hermosa, creo que al día de hoy aún tenemos la expectativa de que vuelva a nevar en Lomas".
No conocía la nieve y fue un lindo momento para disfrutarlo en familia, nos habíamos juntado a comer en la casa de mi mamá y estábamos todos que no lo podíamos creer. Abrigué a mi hijo, que era muy chiquito, para que pueda salir a jugar.
José González, el presidente del Club Para Siempre de Banfield, recuerda la jornada como si hubiese sido ayer ya que, ese día, justo se encontraba en la institución: "Habíamos hecho un evento con shows y una lasaña para que los vecinos puedan venir a comer o a llevarse su porción. Recuerdo estar comiendo y ver el patio y la calle nevada".
Fue una locura hermosa, creo que al día de hoy aún tenemos la expectativa de que vuelva a nevar en Lomas.
En la calle Condarco al 300, en Temperley, se encuentra la casa del vecino Daniel Ricagno, quien al subir al primer piso y abrir la cortina de una de las ventanas se topó con la sorpresa de la nieve: "Fue un golpe a la vista y una enorme sorpresa. Inmediatamente tomé la cámara y saqué fotos a los techos y a las veredas, y después llegaron mi hija y mis nietas. Recuerdo la algarabía de los vecinos por el precioso suceso".
"Es un recuerdo hermoso y espero que este fenómeno se vuelva a repetir", deseó Alixia, que, para cerrar, resaltó lo lindo de observar, a la mañana siguiente, el sol con la nieve que aún perduraba y se resistía a derretirse.