ENTREVISTA Hace 11 partidos que al arquero mendocino no le anotan goles, uno de los factores que lo convierte en uno los pilares fundamentales del Tallarín.
Damián Tello es una de las claves fundamentales de Talleres de Escalada, y esto lo ha dejado en claro desde el año pasado cuando el equipo logró el ascenso a la Primera Nacional. Durante el partido de bautismo ante San Miguel no le anotaron goles, y contra Quilmes no fue la excepción: el arquero extendió a 11 partidos la racha positiva con el arco en cero.
En declaraciones al Diario La Unión, el guardameta de 28 años evaluó estas dos primeras presentaciones en una categoría que conoce muy bien antes de su llegada al Albirrojo tras sus pasos con Chacarita y Alvarado de Mar del Plata, en 2022.
"Estos dos partidos fueron muy positivos. Si bien el partido con San Miguel fue una continuidad de lo que habíamos dejado el año pasado, nos sirvió para darnos cuenta del ritmo que necesitamos para esta categoría; el cual nos impuso Quilmes y pudimos contrarrestar muy bien dentro de la cancha", señaló.
En ese sentido, Tello consideró que el juego del elenco de Remedios Escalada creció de "menor a mayor" de acuerdo a lo propuesto por el rival, aunque contra el "Cervecero" se vio una exigencia distinta en comparación al partido disputado frente al "Trueno Verde".
"El partido con San Miguel fue con más fricción y poco juego, pero fuimos ampliamente superiores, tuvimos varias llegadas al arco contrario. Contra Quilmes fue muy duro desde lo físico y el planteo táctico, hicimos un partido muy inteligente, debíamos hacerlo largo para poder desgastarlos y así poder la diferencia en el segundo. Casi lo logramos, pero estuvimos muy cerca", afirmó.
Y agregó: "El empate ante Quilmes fue muy bueno, el planteo táctico salió casi a la perfección porque no pudimos la diferencia en los últimos minutos donde ellos se habían caídos físicamente y nosotros, con los cambios habíamos encarado con mucha velocidad las transiciones ofensivas".
El "1" oriundo de Mendoza admitió que una de las fortalezas del equipo conducido por Martín Rolón es el bien trabajo hecho por la defensa, una característica conseguida en el 2023 durante su camino por la Primera B.
"Los factores positivos es la solides defensiva que venimos acarreando desde el año pasado, una virtud de una idea de juego que hace con actitud y concentración podemos ser un equipo duro para que no nos hagan goles", destacó.
Sin embargo, el arquero no se duerme en los laureles y admitió que "siempre hay aspectos para mejorar". "Eso ocurre ganemos o perdonamos, debemos ir mejorando en el ritmo y tratar de ser más protagonistas para poder lograr los objetivos", reconoció.
Al contabilizar los partidos de la Primera B, Tello suma más de 990 minutos sin recibir un gol en contra, un factor que lo transforma en figura y alimenta la seguridad del resto del equipo albirrojo para ir en busca de los objetivos.
"Esto influye mucho de manera positiva, la confianza de cada uno de saber que el bloque defensivo está haciendo las cosas muy bien se la da también a los jugadores que trabajan tres cuartos de cancha hacia adelante. Saben que atrás dejamos la vida para mantener el arco en cero, para que puedan marcar la diferencia y lograr los tres puntos", indicó.