Ignacio Makaruk se adueñó del oro en judo en los Juegos Bonaerenses

Ignacio Makaruk, la joven promesa en judo de Lomas de Zamora, ganó nuevamente la medalla de oro en los Juegos Bonaerenses 2023 disputados en Mar del Plata. Viene de consagrarse subcampeón del Campeonato Sudamericano de Judo 2023, realizado el último fin de semana en Paraguay. 

Ignacio, quien sumó un nuevo reconocimiento por el Municipio de Lomas fue dirigido en esta oportunidad por Víctor Hugo Andrade, uno de los profesores del equipo local de Judo de Lomas. El talento local, de 14 años, realiza su preparación física en el Gimnasio para Deportes de Contacto del Parque Eva Perón,  que funciona bajo la órbita de la Secretaria de Deporte del distrito.

Actualmente, el judoca se entrena en el Club Victoriano Arenas, bajo las órdenes de los profesores Ariel Sganga-integrantes del equipo de preparadores del Seleccionado Nacional de Judo- y Javier González. Antes de ellos, lo tuvo como profesor a Juan Diessler, director de escuelas Musubi Dojo; y estuvo dos años en club Lanús con Narváez. Sin embargo, Ignacio dio sus primeros pasos con Nestor Texeira, su primer  formador en el colegio Lujan de Adrogué desde los 3 hasta los 10 años.

En declaraciones al Diario La Unión, Gustavo Makaruk, padre de Ignacio expresó su satisfacción por los logros de su hijo. "Lo del Paraguay fue muy importante porque significó la primera salida del país y, haber quedado subcampeón en el Sudamericano ayudó a que esté más tranquilo con la experiencia ganada, en los Juegos Bonaerenses", señaló.

Además, brindó detalles sobre cómo es el ritmo de vida de Ignacio para conservar un equilibrio sin descuidar su formación educativa y deportiva. 

"Para nosotros es mucho trabajo acompañarlo, un orgullo verlo en el podio y saber todo el sacrificio que pone para entrenar muchas horas todos los días. Lo hace de lunes a viernes dos horas diarias y después le suma gimnasio. A veces hay noches que termina muy cansado, hay días que se pierde cumpleaños de compañeros porque tiene que entrenar y pone su entrenamiento por delante de todo esto", remarcó. 

Y agregó: "La mamá lo vuelve lo con el colegio porque es lo primero, si falla después se va a complicar con el deporte. Estamos felices de poder acompañarlo con el tiempo, dinero, es una suma de todas las cosas. Gracias a Dios lo podemos hacer y estamos felices".

Si bien Gustavo destacó que, actualmente, "se armó un grupo de judocas muy lindo" en el que entrena su hijo, también hizo foco en la rigurosidad de la competencia de este año. 

"Nos da gusto ver cómo los compañeros lo quieren. Ganó los Juegos Bonaerenses el año pasado y este, fue mucho más difícil. Hubo más lucha, los chicos estaban más preparados y estamos contento de que tuvo la posibilidad de cambiar", subrayó el padre de Ignacio.