TESTIMONIO CLAVE Nahuel Vargas, imputado por el asesinato de Fernando Pérez Algaba, acusó a Maximiliano Pilepich de haber sido el autor material del crimen.
Nahuel Vargas, el último detenido por el crimen de Fernando Pérez Algaba, acusó a Maximiliano Pilepich de haber sido quien mató al empresario que fue hallado descuartizado en Ingeniero Budge.
"Maxi dijo que le pegó dos tiros". Con esa frase, dicha ante el fiscal Marcelo Domínguez, Vargas acusó directamente a Pilepich de ser el autor material del crimen del empresario.
El detenido confesó que el homicidio ocurrió en una casa dentro del predio "Renacer" de General Rodríguez, donde se habían encontrado Vargas, Pilepich y la víctima días antes del asesinato.
Vargas, quien fue capturado en las últimas horas en la casa de su madre en Castelar, partido de Morón, quedó imputado por "homicidio cuádruplemente agravado por el uso de arma, alevosía, codicia y el concurso premeditado de dos o más personas".
Su testimonio es similar al que había brindado el imputado Luis Contreras, hermano de Alma Nicol Chamorro (la primera detenida por el caso), quien aseguró que Vargas y Pilepich llegaron a su casa de Ingeniero Budge con el cadáver del empresario ya descuartizado y embolsado. En esa línea, Contreras confesó que los ayudó a ambos a meter el cuerpo en una valija para luego descartarlo en el Arroyo del Rey, donde sería encontrado.
Cabe recordar que Pilepich había sido arrestado por efectivos de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora y del Departamento de Homicidios de la Policía Bonaerense. Lo encontraron en una vivienda ubicada en la calle La Santa María al 2.000, en la localidad de Paso del Rey, partido de Moreno.