A tener en cuenta El Mirlayitas tendrá 21 días sin actividad y es algo que los entrenadores buscará aprovechar para llegar bien a la recta final del Torneo Clausura.
Los Andes necesitaba un triunfo de la magnitud que tuvo el del sábado ante Deportivo Armenio para cambiar el semblante antes de la fecha libre y de esa manera darle otro valor a los resultados obtenido en las fechas pasadas. Así, el Milrayitas llega al descaso con una racha de cinco partidos sin perder, con dos victorias y tres empates, y afianzado en zona de Reducido para poder trabajar con tranquilidad sobre diferentes cuestiones.
En ese sentido, una de las más importantes pasan por la recuperación de varios futbolistas que se encuentra al límite desde lo físico y este descanso de tres semanas (la tercera por la receso que habrá por las Elecciones P.A.S.O) le permitirá recuperar a varios futbolistas para llegar a la recta final del Torneo Clausura de la mejor manera posible.
Y en esa lista de futbolistas se encuentran varias piezas importantes del equipo como el mediocampista Gabriel Cañete, que jugó lesionado los últimos partidos, el extremo Matías González, que llegó al límite desde lo físico, y el marcador central Gastón Martínez, que no entrenó durante la última semana y estuvo en el banco de suplentes en el último partido.
A ellos habría que sumarle a Brandon Barbas, que salió lesionado a los 20 minutos del segundo tiempo por un golpe en el tobillo y ahora tendrá 21 días sin actividad para recuperarse y llegar en condiciones al encuentro ante Argentino de Quilmes.
También le vendrá muy bien a Alan Ortiz, que dejó atrás un desgarro en el bíceps femoral derecho y el sábado disputó sus primeros minutos, como así también a los lesionados Sebastián Martelli y Cristian Canan, que evolucionan de sus respectivas lesiones.
Sin embargo, esas cuestiones no serán las únicas que buscará aprovechar la dupla técnica compuesta por Alejandro Migliardi y Joaquín Iturrería durante estas semanas de descanso. Y es que utilizará estos días para potenciar el rendimiento de un equipo que, partido a partido, sigue en crecimiento.
Justamente, en ese sentido, los últimos dos partidos mostraron que notoria mejoría en la faz ofensiva, pero no sólo en goles (anotó cinco en dos partidos) sino también generación de situaciones de peligro, con un tridente ofensivo con Luis Pérez, Matías Córdoba y Matías González- que se hizo muy importante.
La contracara de este Los Andes fue el aspecto defensivo (sufrió tres goles en dos partidos) y eso es uno de los aspectos que la dupla trabajará en esta semana para sacarle el mayor provecho a trabajo ofensivo que realizó en los últimos partidos de la Primera B, en los que en cuatro de los últimos cinco partidos consiguió abrir el marcador antes de los 20 minutos del inicio del partido, pero en tres se lo empataron rápidamente y no lo pudo aprovechar más allá de lo que fue la victoria ante Armenio.