SOLIDARIDAD Las Mamitas lanzaron una colecta para recolectar lápices, lapiceras y otros objetos indispensables para el inicio de clases, que será la próxima semana.
Crédito: Eduardo Alfaro.
Las Mamitas no descansan. En breve inician las clases y ellas están dispuestas a ayudar.Con el inicio de clases a la vuelta de la esquina, son muchas las instituciones y organizaciones no gubernamentales que intentan brindarles una ayuda a los más chicos. Ese es el caso de Las Mamitas, el grupo de mujeres de Lomas que trabaja incansablemente por la comunidad: en este caso lanzaron una colecta de útiles, nuevos o usados, que serán repartidos a los más chicos en Ingeniero Budge.
Álida de Acuña (86) es la referente de la ONG que trabaja en Lomas hace casi tres décadas, de forma ininterrumpida, y convocó a los vecinos a ser solidarios con los que más lo necesitan, en este caso los chicos. En su casa, ubicada en Lope de Vega 1440, está recibiendo útiles nuevos y usados para luego armar kits y entregarlos a quienes lo necesiten.
En su casa, ubicada en Lope de Vega 1440, está recibiendo útiles nuevos y usados para luego armar kits y entregarlos a quienes lo necesiten.
Lápices de grafito y de colores (de cualquier tamaño y marca, goma, corrector, lapicera, regla, boligoma, cartuchera y mochila son algunos de los objetos que más están pidiendo desde Las Mamitas. "No importa que sea usado, todo es bienvenido. Incluso si los lápices no tienen punta, yo me ocupo de dejarlos en condiciones antes de repartirlos", dijo de Acuña, dejando en claro que la vocación de servicio es más fuerte que cualquier impedimento físico lógico de su edad.
"La situación económica está complicada para las familias que tienen varios hijos, nietos o sobrinos. Los útiles cuestan dinero y sé que entre todos podemos ayudar a los que no tienen la posibilidad de comprarlos, porque la educación es fundamental en los niños y niñas", sostuvo.
No importa que sea usado, todo es bienvenido. Incluso si los lápices no tienen punta, yo me ocupo de dejarlos en condiciones antes de repartirlos.
Cabe resaltar que, en su casa, Álida también recibe ropa y calzado en buen estado, ya que siempre hay vecinos que suelen consultarle si tiene prendas para regalar.
"Mientras tenga vida, voy a estar junto a mi gente y a todos los que necesitan una mano", finalizó la lomense, emocionada.