Prisión preventiva para la mujer que se robó a una beba en el Hospital Alende

AVANZA LA CAUSA El Juzgado de Garantías Nº6 de Lomas dio lugar al pedido de la UFI 4. La joven de 27 años se había disfrazado de enfermera para llevarse a una recién nacida.

La imputada había quedado filmada en una cámara de seguridad del hospital.

Procesaron con prisión preventiva a la mujer que se había robado a una beba en el Hospital Materno Infantil Dr. Oscar Alende de Ingeniero Budge.

La imputada es Erika Castaño, de 27 años, quien el pasado 14 de diciembre se había disfrazado de enfermera para llevarse a Aylín, una beba recién nacida en el centro de salud ubicado en Claudio de Alas y Azamor. Había sido detenida horas después en Luis Guillón, cuando se disponía a escapar hacia la Costa Atlántica con la pequeña.

La causa es llevada adelante por la Unidad Funcional de Instrucción Nº4 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora. La fiscal Silvina Estévez solicitó la prisión preventiva para la acusada y el pedido fue convalidado por el Juzgado de Garantías Nº6 de Lomas, según confirmaron fuentes judiciales a La Unión.

Castaño quedó imputada por el delito de "sustracción de menores". Al ser indagada por la fiscal en diciembre, se negó a hacer declaraciones por consejo de su abogado defensor y todavía se mantiene en silencio, precisaron las fuentes a este medio.

EL HECHO

Todo empezó el 14 de diciembre de 2022 cerca de las 9:40 de la mañana. Erika Castaño se puso un ambo simulando ser una enfermera y entró a la habitación donde se encontraba Aylín, recién nacida, junto a su mamá, Nicole Sandoval. Dijo que se llevaría a la beba para realizarle un control, pero en realidad se la estaba robando.

Una cámara de seguridad captó a la mujer vestida de enfermera saliendo de un ascensor. En otra imagen se la veía ya sin el ambo. Efectivos de la Estación de Policía de Lomas y de la DDI de Lomas emprendieron una intensa búsqueda que duró varias horas, hasta que recibieron un dato clave: la empleada de una estación de servicio de Llavallol había visto a una mujer sospechosa que caminaba junto a una beba en brazos.

Los agentes siguieron el recorrido y así hallaron a Erika y a Aylín en las inmediaciones de la estación de Luis Guillón, en un local de venta de pasajes. La mujer se disponía a abordar un colectivo de larga distancia con destino a la Costa Atlántica. Tanto ella como la beba fueron trasladadas al Hospital Alende, donde Nicole reconoció a su hija y a la falsa enfermera.

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