Lesa Humanidad Una delegación de la Mesa de Trabajo del Espacio para la Memoria concurrió a la última audiencia realizada este martes.
La vuelta a la presencialidad del juicio por los crímenes de Lesa Humanidad cometidos en el Pozo de Banfield permite que familiares y organizaciones de Derechos Humanos acompañen a las personas que brindan su testimonio en este proceso histórico. Una delegación de la Mesa de Trabajo del Espacio para la Memoria, representada por Jazmín Ocampo y Daniel Prassel, estuvo en la última audiencia realizada este martes.
"Realmente estar ahí posibilita sentir, al menos un poco, el dolor de cada uno de los familiares que recorren tribunales desde hace años esperando justicia. Al mismo tiempo se genera un ámbito ameno y de contención para los mismos ya que no se sienten solos cuando ven una sala que los escucha con atención, los aplaude y los abraza al finalizar esos testimonios tan valiosos para fortalecer la democracia", expresó Prassel.
En la audiencia Nº65 declaró Mónica Streger, que tiene dos hermanos (Silvia y Eduardo) desaparecidos que iban al ENAM. En la escuela de Banfield se conoce como la División Perdida a las más de 30 personas que fueron víctimas de la dictadura cívico-militar. Mónica también es cuñada de Rodolfo Torres, desaparecido junto a Silvia el 5 de septiembre de 1977 en Turdera y vistos por última vez en el Pozo de Quilmes.
El segundo testimonio estuvo a cargo de José Eduardo Moreno, secuestrado con su padre Antonio y su tío José el 14 de septiembre de 1977 en Merlo. Primero fueron trasladados al Pozo de Banfield, donde estuvieron detenidos unos días, y luego fueron llevados a la Comisaría de Valentín Alsina en la que posteriormente los liberaron.
Ante el Tribunal Federal N°1 de La Plata también declararon Clara Petrakos, quien busca a su hermana nacida durante el cautiverio de su madre en el Pozo de Banfield; y su tía Alejandra Castelllini, cuya hermana María Eloísa desapareció el 11 de noviembre de 1976 estando embarazada de entre tres y cuatro meses. Los testimonios indican que estuvo tanto en Puente 12 como en el Pozo de Banfield.
"Como militantes políticos, pero mayormente como ciudadanos, es una obligación ética y moral no abandonar la presencia en estos procesos jurídicos que se han logrado a base de inmensas luchas de los organismos de Derechos Humanos y el pueblo. No solo se juega más memoria, verdad y justicia sino el modelo de comunidad que queremos seguir construyendo para que las próximas generaciones puedan saber y comprender lo pasado y que, con mas herramientas, vigoricen una sociedad que se defienda ante cualquier tipo de vulneración de derechos", reflexionó Prassel luego de presenciar la audiencia.
Cada 15 días se podrá participar presencialmente del juicio que entre sus imputados tiene a represores como Juan Miguel Wolk, Miguel Etchecolatz, Jorge Bergés y Jaime Smart. Para más información hay que comunicarse con las redes de la Mesa de Trabajo del exPozo de Banfield.