Solidaridad Ciro Lemus posee una enfermedad que hace que deba tomar pastillas de $110 mil y hacerse estudios de $130 mil. Su mamá acude a los vecinos para seguir adelante.
Un verdadero guerrero. Ciro Lemus (8) es un niño lomense que sufre de Talasemia Mayor, una enfermedad hereditaria que afecta a sus glóbulos rojos. Silvia Lemus (44), su mamá, contó que la Talasemia no tiene cura y el tratamiento es muy costoso, ya que debe tomar pastillas a diario y tiene que realizarse estudios cada seis meses, todo esto con valores que superan los $110 mil. Lo cierto es que Ciro y Silvia necesitan de la ayuda de los vecinos para poder luchar en contra de una enfermedad que no tiene cura.
La Talasemia Mayor es una enfermedad hereditaria que es catalogada como la forma más severa de la anemia ya que la médula ósea no produce los suficientes glóbulos rojos, lo que produce. "Ciro fue diagnosticado a los cuatro meses y va a vivir toda su vida a base de transfusiones de sangre, un procedimiento que debe realizarse cada dos semanas. Ya lleva más de 170 transfusiones porque no hay una cura", explicó su mamá y demostró la complejidad de la situación.
Ciro fue diagnosticado a los cuatro meses y va a vivir toda su vida a base de transfusiones de sangre, un procedimiento que debe realizarse cada dos semanas. Ya lleva más de 170 transfusiones porque no hay una cura.
Para compensar la anomalía, Ciro debe tomar Jadenu, un costoso medicamento que controla su nivel de glóbulos rojos. "Cada caja, que le dura dos semanas, cuesta más de $110 mil", reveló la mamá, con su voz sensiblemente angustiada.
Pero eso no es todo: el medicamento produce un exceso de hierro (eliminado a los días por los propios glóbulos rojos) que es contraproducente para el organismo de Ciro, más específicamente en la zona hepática y cardíaca, y por eso cada seis meses debe realizarse una resonancia de alta complejidad (llamada T2 Estrella), también con valores muy costosos. "Hay muy pocos lugares que están equipados para ese tipo de resonancia. Es un estudio que se tiene que hacer cada seis meses y que cuesta aproximadamente $130 mil", contó Silvia, que explicó que para la próxima que deba hacerse ya consiguió quien la pague, ya que ella no trabaja y Ciro no cuenta con una obra social que cubra dichos gastos.
Cada caja de medicamento, que le dura dos semanas, cuesta más de $110 mil.
Tanto Ciro como Silvia necesitan de la ayuda de los vecinos para poder pelear día a día contra la enfermedad. Hay dos maneras de poder colaborar con la familia: acercarse a Casa Cuna (Hospital de Niños Pedro de Elizalde, en Montes de Oca 40) para donar sangre, de 8 a 10.30, o bien realizar un aporte de dinero a la cuenta del Banco Galicia con número 4030064-0-061-6 y CBU 0070061030004030064068 (a nombre de Silvia Cristina Lemus).
Hay muy pocos lugares que están equipados para ese tipo de resonancia. Es un estudio que se tiene que hacer cada seis meses y que cuesta aproximadamente $130 mil.
Lemus dejó en claro que la vida de Ciro está limitada y llena de cuidados, ya que, por ejemplo, no puede realizar actividad física. "Él llora porque no puede hacer gimnasia en la escuela", reveló, con gran tristeza.
"Yo no quiero que mantengan a mi hijo. Él cobra una pequeña pensión, pero soy madre soltera y no tengo trabajo porque tengo que cuidarlo. Lo único que pido es que alguien pueda apadrinar a Ciro en cuanto al medicamento y a la resonancia", cerró Lemus, a la espera de poder contar con corazones solidarios que se unan a la causa.
Hay dos maneras de poder colaborar con la familia: acercarse a Casa Cuna (Hospital de Niños Pedro de Elizalde, en Montes de Oca 40) para donar sangre, de 8 a 10.30, o bien realizar un aporte de dinero a la cuenta del Banco Galicia con número 4030064-0-061-6 y CBU 0070061030004030064068 (a nombre de Silvia Cristina Lemus).