Juicio Este martes declaran la hermana de un detenido-desaparecido y uno de los sobrevivientes del centro clandestino.
La audiencia Nº24 del juicio por los delitos de lesa humanidad cometidos en el Pozo de Banfield tendrá este martes dos testimonios claves.
Ante el Tribunal Oral Federal N°1 de La Plata declarará Liliana Canga, hermana de Ernesto Enrique Canga, desaparecido y detenido en el centro clandestino que formó parte del Circuito Camps. Ernesto había sido delegado gremial y trabajaba en la empresa Petroquímica Sudamericana al momento de su secuestro el 25 de septiembre de 1976 por un grupo de hombres armados que entraron a su casa de City Bell, pusieron a su mamá Sara Barragán contra la pared, lo hicieron levantar y se lo llevaron. Los secuestradores se movían en varios autos Torino de color blanco.
Un mes después, otro grupo de personas se presentó en su casa, dijeron ser "fuerzas de seguridad" y que habían venido "por una denuncia". Cuando la madre les explicó que se habían llevado a su hijo, le pidieron una fotografía y tomaron los datos prometiendo traer noticias que, por supuesto, nunca llegaron.
Ernesto fue visto por Pablo Díaz (sobreviviente de La Noche de los Lápices) en el Pozo de Arana y por Alicia Carminati (ex detenida) en el Pozo de Banfield. Sus restos fueron inhumados como NN en el Cementerio de La Plata y posteriormente identificados en 2011 gracias al trabajo del Equipo Argentino de Antropología Forense. Se trata de uno de los múltiples casos que dejan en evidencia la responsabilidad empresarial en delitos de lesa humanidad.
La audiencia también contará con el testimonio de Marcos Alegría, sobreviviente del Pozo de Banfield. El juicio, que también involucra a los crímenes cometidos en el Pozo de Quilmes y El Infierno (Lanús), podrá seguirse desde las 9.30 por los canales de Youtube del Poder Judicial de la Nación y de La Retaguardia.
TAREAS DE PRESERVACIÓN
La subsecretaría de Derechos Humanos de la Provincia organizó una recorrida por el Espacio para la Memoria (ex Pozo de Banfield) para proyectar las tareas de preservación y recuperación del predio, especialmente de las plantas altas donde se encuentran las zonas de calabozos y la maternidad clandestina que funcionó en el centro.
"Mientras que en la planta baja realizaremos tareas de readecuación y se proseguirá con la reparación de las intervenciones defectuosas para garantizar que favorezcan la preservación, el sostenimiento de las obras de limpieza de desagües y desagote del subsuelo", informaron.
Desde la Mesa de Trabajo del Espacio siempre remarcan que "el avance del juicio contra los represores es clave para profundizar la puesta en valor y habilitar sectores como los calabozos y leoneras que, como son prueba en la causa, no se pueden utilizar durante las recorridas que organizamos para la comunidad".