SOLIDARIDAD Se trata del chico de Llavallol con parálisis cerebral que necesita una silla de ruedas especial. Su familia tiene como objetivo recaudar $400 mil
La familia de Benjamín Tahiel Vega continúa con su campaña para recaudar los $400 mil que necesitan para comprar la silla de ruedas especial que el chico precisa para mejorar su calidad de vida. El próximo fin de semana organizarán un torneo de penales y un festival a beneficio para seguir dando pequeños pasos que les permitan alcanzar el tan ansiado objetivo.
El sábado a las 14 en las "Canchas Ito" de Llavallol (Pichincha 2063) se realizará un campeonato de penales en el que allegados venderán patys y bebidas para recolectar fondos. La inscripción será de $500 por pareja y los interesados ya pueden anotarse a través del Facebook "Todos con Benja". El primer premio serán dos mochilas y el segundo dos botineros.
En tanto, el domingo desde las 19 frente al monoblock 9 del barrio El Campanario habrá un festival con bandas invitadas, desfile de murgas, comparsas, buffet y mucho más. Será una jornada para toda la familia en la que todos podrán ayudar. "Estamos cada vez más cerca pero cada granito de arena suma y muchísimo para nosotros", precisaron sus familiares.
Benjamín es un chico de 8 años con parálisis cerebral y epilepsia. Desde hace dos años y medio, su familia está tratando conseguir la silla de ruedas postural necesita, pero la obra social IOMA no les da respuesta. Cansados de esperar, se decidieron a comprarla. Consiguieron que una empresa que las vende a $800 mil se las deje a $400 y ni lo dudaron.
"La silla ya está en proceso y ya estamos haciendo lo imposible para adquirirla", confió Adriana, su abuela. Hace poco más de una semana el chico se fue a tomar las medidas para que la fabriquen para él. "Esta silla es especial porque es una silla postural con estructura plegable", explicó la mujer. La que tiene ahora ya no le sirve, le queda chica.
Benjamín tuvo una infancia muy difícil. Nació prematuro, de 24 semanas. Estuvo internado en neonatología cuatro meses y por su condición tuvo que pasar por una colonostomía y 18 transfusiones de glóbulos rojos. "Es un nene especial", resalta su abuela. Hasta los tres años estuvo con sonda y sus visitas al médico se convirtieron en parte de su rutina cotidiana.
Con el tiempo aparecieron otros problemas. La epilepsia lo obligó a tomar más pastillas a los que ya se había acostumbrado que tomar. Y tuvo que comenzar una dieta especial. "El no puede comer cualquier cosa. Por ejemplo, se deshidrata mucho y tiene que tomar Gatorade, yogurt, o alimentos especiales", explicó Adriana. "Ahora, por ejemplo, tiene que ser operado de la cadera", agregó.
En medio de todo eso su abuela se desvive por darle una mejor calidad de vida. "Él necesita todo tipo de cuidados y queremos que esté lo mejor que pueda", acotó la mujer. Benjamín actualmente vive con ella y su padre en la localidad de Llavallol. Su madre lo abandonó hace más de dos años y medio. Y sus familiares más cercanos comenzaron a hacerse cargo de él.
"Mi hijo ahora está tratando de mejorar la casita que tienen atrás, pero le faltan muchas cosas. La pieza de Benja tiene que tener todas las comodidades que recomiendan los médicos porque él por los problemas de salud que tiene no puede estar expuesto a ciertas condiciones", resaltó.
A pesar de la garra que le ponen día a día, algunas cosas se hacen cuesta arriba. "En IOMA me negaron la medicación que toma porque es epiléptico. Él cobra una pensión de $12 mil y los remedios cuestan $8 mil. ¿Cómo puede ser que un chico como Benja pueda lograr tener una buena calidad de vida si en la obra social lo dejan a la deriva y no le dan respuesta?", se preguntó.
Sin embargo, la actitud de Benjamín es lo que los levanta y los obliga a seguir. "Benja es un niño con mucha garra, el siempre te va a responder con una sonrisa y te va a demostrar que puede con cualquier obstáculo que se le presente. Por eso invitamos a todos a que nos ayuden y que el esfuerzo que él le pone, nos de sus frutos", concluyó.