Orgullo local Es miembro de Asociación Taekwondo Sur y siempre se le ?dificultó? para competir en el exterior, pero ahora, con los torneos virtuales por la pandemia, pudo codearse con los mejores y no falló. ?Es un título que vale mucho para mí?, señaló.
Después de años de lucha y sacrificio, de entrenamientos y constancia, el taekwondista Leonel Benítez empieza a ver el fruto de su esfuerzo en el deporte que ama y vive un gran momento tras conseguir hace una semana el título más importante de su carrera: se coronó campeón en el Sudamericano ITF realizado de manera virtual en medio de la pandemia y así se posicionó como el mejor de América del Sur en la modalidad formas.
Para el joven de 23 años, que forma parte de la Asociación Taekwondo Sur y se entrena en el club Los Andes, el primer lugar en el Campeonato Sudamericano fue el título más importante de su carrera, pero no es único que logró en el último tiempo. En 2018 consiguió la medalla de bronce en el Torneo Nacional de Taekwondo y también suma victorias importantes ante Franco Fernández, excampeón del mundo, y Matías Quercia, actual campeón provincial y quien además es compañero suyo de equipo.
“Mi primera experiencia en el taekwondo fue a los 6 años, pero después tuve varias ideas y vueltas con el deporte, ya que volví a los 10 y nuevamente lo dejé. Recién a los A 16 años lo tomé más en serio y nunca más lo dejé”, comentó Benítez sobre su inicio en la disciplina, lamentándose por la inconsistencia de esos primeros años. “Si hubiese entrenado de corrido desde un comienzo, los logros hubiesen llegado mucho antes”, remarcó.
Hoy, ya afianzado y sumando buenos resultados a nivel local como internacional, el lomense define que esta disciplina es “todo” para él, ya que es “un estilo de vida” y que le provoca sensaciones inimaginables. "El practicante lleva el taekwondo a todos lados. Lo vive y lo respira. Es sentarse a cenar y saber que en algún momento se hablará de entrenamiento, de torneos, de viajes, de anécdotas… El taekwondo no es sólo entrenar fuerte e ir a competir, va más allá. Hay que vivirlo y sentirlo”, comentó, algo emocionado, el reciente campeón sudamericano, sobre lo que significa este deporte en su vida.
En esta pandemia, justamente, encontró una “gran oportunidad” para desarrollar el deporte que más le gusta y poder competir de manera internacional, algo que, por los altos costos de los viajes, no había podido hacer los años anteriores. Por eso, gracias a esta nueva forma de competencia, tuvo la posibilidad de mostrar su talento y en su primer contacto con los mejores del continente, no falló.
“Es un título que valió mucho sentimentalmente, ya que fue mi primera experiencia internacional. En lo personal, siempre se me dificultó poder pagar un torneo de esta magnitud y por eso lo disfruté muchísimo”, remarcó. Y consciente de eso, ponderó la realización de los torneos virtuales. “Las competencias virtuales son una oportunidad genial para los competidores que no pueden costear una competencia presencial, que son muy caras. Además hay muchísimos deportistas que, por motivos económicos, no pueden estar en un nivel internacional y es una lástima porque acá hay un gran nivel”, destacó el joven lomense, que no desaprovechó la oportunidad y hoy goza de un gran momento.
Benítez, que forma parte de la escuela que es dirgida por el Maestro Miguel Quintana y es entrenado por Sabumnim Francisco Quintana, entrena dos o tres veces por semana a través de la plataforma Zoom y el resto de los días sigue al pie de la letra la rutina que le dan los entrenadores, sin perder de foco su gran objetivo: seguir creciendo en el mundo del taekwo