La Unión | DEPORTES

Patronato le pegó otro cachetazo a River

Superliga. El Patrón se floreó en el Monumental, donde el Millonario lleva tres derrotas consecutivas y no encuentra el rumbo. Gabriel Ávalos clavó un hat-trick y descontó Cristian Ferreira.

River todavía no volvió de las vacaciones y la Superliga es un suplicio que no tiene fin. La dulzura de fines de año pasado ahora se transformó en un dolor de cabeza. El Millonario perdió 3-1 frente a Patronato, que se puso a un punto de San Martín de Sa Juan en la tabla de los promedios del descenso.

El campeón de América hilvanó su tercera caída consecutiva (todas en el Monumental).

Marcelo Gallardo paró un 11 alternativo, como si estuviera jugando a dos frentes. Se entiende que las dos derrotas anteriores mostraron un bajo nivel general del equipo, pero el recambio fue total.

Patronato llegó al Monumental con la idea de llevarse algo a Paraná. El punto era negocio. Pero de a poco, se dio cuenta que este River está con la cabeza en otro lado. Se animó. Y no perdonó.

En la primera que tuvo, facturó. Zuculini no pudo controlar la pelota en el medio y salió el envío de Compagnucci para Ávalos, que le ganó la espalda a Sibille y definió cruzado.

Y luego del refresco por las altas temperaturas, otra vez una desatención derivó en una corrida y centro de Compagnucci para que Ávalos, entrando a la carrera y de cabeza -por detrás de Rojas-, se vuelva a convertir en el verdugo de Lux.

Los hinchas observaban atónitos. El equipo era un cúmulo de errores defensivos y mostraba carencias para generar algo productivo en ofensiva. De la Cruz no fue eje de juego, Palacios no gravitó y tanto Borré como Beltrán estuvieron peleados con el balón.

Gallardo modificó el esquema, sacó a los dos laterales y metió a Ponzio y Picazzo. Leo fue al fondo y el juvenil se juntó con los dos delanteros. Sin embargo, las soluciones la encontró la visita en otro pase de Compagnucci a Ávalos, que la picó ante la salida del arquero.

Patronato estiraba la diferencia a tres ante el estupor del Monumental. Al local lo metía en partido un descuento. Y lo consiguió el chico Ferreira con un gran remate desde lejos.

A partir de ese momento, fue a matar o morir. Patronato se cerró cerca de Bértoli y, a falta de fútbol, llovieron los centros. De contra lo perdió Apaolaza frente a Lux, y a Borré le anularon un cabezazo (estaba apenas adelantado). No hubo milagro, pero sí un batacazo de esos que Patronato (y River) no olvidarán.

 

https://youtu.be/A18cIDe

Temas Relacionados
Ver más: