“Con el anterior gobierno los clubes vivimos una desprotección absoluta”

La cuarentena obligatoria para evitar la masificación de los contagios por Covid-19 le dio tiempo al Gobierno para preparar mejor la infraestructura sanitaria pero, a la vez, complicó el panorama de entidades sociales como los clubes de barrio.

Alejados de la lógica empresarial, viven en gran parte del movimiento diario de socios y deportistas, y del aporte económico que pueda hacer cada uno. Ante el cierre de puertas preventivo, no tienen ingresos y después de dos meses ya no saben cómo sostenerse.

Martín Sabio, presidente de la Unión de Clubes de Barrio de Lanús, contó cuál es el panorama en la región, qué función están cumpliendo las instituciones por estos días y cómo sobrellevan este conflicto. “Es una situación muy compleja porque la pandemia es trasversal a todos pero cada uno tiene su propio contexto. Hay clubes con pileta y 100 empleados y otros que no tienen ni vestuario y nosotros abarcamos a todos porque filosóficamente son clubes de barrio”, explicó. En ese contexto, “algunos con gran infraestructura son parte del soporte sanitario y otros de barriadas más humildes se dedican a darle de comer a la gente, haciendo ollas populares, con apoyo de vecinos, organizaciones sociales y comerciantes”.

La Unión de Clubes está conformada por unas 50 instituciones de Lanús y, a grandes rasgos, todas viven una situación similar. “Si fueran empresas te diría que están al borde del quiebre, es imposible de manejarse si hay cero ingresos. Hay clubes que no tienen cuota social y subsisten con la jornada deportiva, y otros están más estructurados y hasta reciben colegios durante el año. Ante esa realidad tan amplia, cada uno tiene su conflicto pero en estas semanas se han ido reinventando”, señaló Sabio quien es presidente del Club Olimpo de Lanús.

Así, por caso, algunos clubes han improvisado una verdulería en la puerta de la institución y otros implementaron el pago electrónico de las cuotas. Algunos venden barbijos y otros armaron bingos virtuales. “Hacemos malabares para salir adelante y tenemos confianza en que esto se va a ir arreglando de a poco”, resaltó Sabio.

En esta línea, el directivo valoró el apoyo que tienen de parte del Gobierno nacional que los recibió en un encuentro virtual para empezar a gestionar subsidios y ayudas en este contexto difícil. “Fuimos convocados por el Gobierno a una mesa para charlar protocolos y distintos temas. Pudimos expresarnos, explicar cuáles son nuestras problemáticas y hoy estamos a la espera y dándole el tiempo de reacomodamiento al Gobierno. Esta gestión está hace cinco meses y puedo asegurar que en ese tiempo eso hicieron mucho más por los clubes que en los últimos 4 años”, valoró.

Y agregó: “Con el anterior gobierno vivimos una desprotección absoluta. El Ministerio de Deportes pasó a ser una agencia, a ese nivel. Cada año el presupuesto era menor. Nadie nos recibía, no había con quien dialogar, fue un nivel de ninguneo enorme”. Inclusive, la Unión de Clubes ganó preponderancia y reconocimiento por su lucha ante los tarifazos, una cuestión que ocupó la agenda de cada institución deportiva en el país durante 2017 y 2018.

Por último, habló sobre la regularización de las instituciones, un ítem clave para acceder a beneficios impositivos o subsidios. “El presidente de un club de barrio a veces es también el bufetero o el entrenador y va al club después de haber trabajado todo el día. Ahí reciben pibes, a los que hay que darle una merienda y contenerlos. No queda mucho tiempo para hacer gestiones o trámites complicados. Ahora es el momento de empezar a ver esos detalles e ir puliéndolos de a poco