Capitanich, sobre conflicto en Lear: "El Partido Obrero defiende interes de la patronal"
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El jefe de Gabinete cuestionó la acción de esa organización política en la situación que se vive en la autopartista. En tanto, empleados de la firma volvieron a cortar hoy el tránsito en Panamericana.
En medio de la Jornada Nacional de protestas de organizaciones sociales, sindicales y políticas por despidos y suspensiones en la multinacional autopartista Lear, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, respondió con acusaciones al Partido Obrero y los trabajadores al ser consultado sobre la situación: "En Argentina el partido que defiende los intereses populares es el peronismo, el Partido Obrero defiende a las patronales".
"El que defiende los intereses de los trabajadores argentinos es el Partido Justicialista a través, por ejemplo, de las convenciones colectivas de trabajo. El Partido Obrero defiende los intereses de la patronal para hostigar el funcionamiento de la actividad económica y de las empresas", dijo el jefe de Gabinete en su habitual encuentro con la prensa.
Capitanich formuló estas declaraciones desde Aeroparque, donde partirá hoy para asistir al velatorio del intendente de la ciudad de Mendoza, Víctor Fayad, fallecido ayer víctima de cáncer.
"El Partido Obrero no es un partido antisistema. Es un partido del sistema preferido por los capitalistas y los grandes empresarios", señaló Capitanich al poner como ejemplo que "si se opone a la generación de energía atómica, es porque defiende intereses de petroleras".
Ayer, la empresa Lear Argentina comunicó que cerrará sus puertas por tiempo indeterminado y que abonará los sueldos del personal por 15 días.
Las razones esgrimidas fueron "imposibilidad de garantizar seguridad en la planta de General Pacheco", según indicaron fuentes del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor.
En respuesta a la medida, esta mañana trabajadores de la autopartista realizan un nuevo corte en la colectora de la autopista Panamericana, a la altura de General Pacheco, ante lo que consideran un "lockout patronal".
El conflicto se inició el 27 de mayo pasado, cuando la compañía suspendió a 330 trabajadores, alegando una merma en la producción, y se recrudeció con la ratificación de la suspensión de 200 empleados, pero esta vez sin goce de sueldo, y el despido de 100 de ellos, el 26 de ju