La noticia se conoció a través de fuentes diplomáticas estadounidenses citadas por las agencias internacionales y minutos después confirmada por la presidencia mexicana.

Los reportes iniciales no incluyeron comentarios sobre el tono, el contenido y los resultados de la conversación. Tampoco aclararon cuál de los dos presidentes gestionó la llamada.
En un comunicado oficial, la presidencia de México sostuvo: "Los Presidentes tuvieron una conversación constructiva y productiva en torno a la relación bilateral entre ambos países, incluyendo el tema del déficit comercial de Estados Unidos de América con México, la importancia de la amistad entre nuestras naciones, y la necesidad de que nuestros países trabajen juntos para detener el tráfico de drogas y el flujo ilegal de armas.
En cuanto al muro de la controversia, el comunicado asegura que "ambos Presidentes reconocieron sus claras y muy públicas diferencias de posición en este tema tan sensible, y acordaron resolver estas diferencias como parte de una discusión integral de todos los aspectos de la relación bilateral. Los Presidentes también convinieron por ahora ya no hablar públicamente de este controversial tema".
El nuevo jefe de la Casa Blanca insiste con que le hará pagar la obra a los mexicanos, una imposición que Peña Nieto considera “inaceptable”.
Al margen de la pared, Trump causó conmoción en las altas jerarquías de México al insistir con que quiere modificar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Nafta o TLCAN, en español), firmado en 1994, en línea con su idea “American First” (Estados Unidos primero).
"Cualquier acuerdo que se proponga que lastime o vulnere el interés económico, social de México o que lastime la dignidad de la Nación, por supuesto será inaceptable", replicó recientemente el canciller mexicano, Luis Videgaray.
El 80 por ciento de las exportaciones mexicanas tienen como destino a Estados Unidos, un país ahora gobernado por quien aconseja públicamente a su pueblo a comprar productos estadounidenses y a su clase empresarial a dar trabajo a los estadounidenses.