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Fotografía el abandono y la inevitable necesidad de valerse por uno mismo

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A través de perros y gatos sin hogar, autos oxidados y fachadas maltratadas, María Desprecio retrata lo que tiñe su interioridad.

Un perro callejero le implora al cosmos con ojos de cielo; un gato observa el suelo con la cabeza vencida sobre un auto viejo y oxidado, mientras otro angelito de cuatro patas parece sonreírle a la vida detrás de lo que fue el alambrado de una casa de familia, hoy deshabitada.

Son fotos que retratan el abandono y la consecuente necesidad de valerse por uno mismo que captó con su lente inquieta la vecina María Desprecio y que el sábado estuvo exhibiendo en la Fiesta Surfer Rosas, en Cultura del Sur, Meeks 1066, Temperley. “El amor por la fotografía debe ser de las pocas cosas auténticas y agradables que heredé de mi viejo”, dice María, y deja entrever una niñez compleja, de esas que envejecen y agudizan la mirada.

“Trato de atrapar aquello que me devuelve el alma en su forma más auténtica”, define. “La fotografía y los animales son realmente lo único que me separa un poco de todas las cosas malas que habitan con nosotros este mundo”, agrega.

-¿Qué es lo que más te inspira al momento de elegir qué fotografiar?

-En la mayoría de los casos son los perros, porque nací rodeada de ellos y en ellos siempre encontré una amistad única. La incondicionalidad, el amor desmesurado, y la fiel compañía fue lo que salvó mi sensibilidad mientras crecía en una familia de lo más conflictiva. A medida que fui creciendo, desarrollé también una gran empatía con los gatos y con la naturaleza en general. Soy una gran admiradora de todo aquello que cuenta historias, ya sea un animal abandonado que tuvo que aprender a valerse por sí solo; un auto oxidado en una calle mil veces transitada; o la fachada maltratada de alguna casa o local.

-¿Qué buscás comunicar con tus fotos en general?

-Pretendo que quien las mire logre empatizar plenamente con el animal, sintiéndose uno. A veces con relatos, a veces con frases breves; el mensaje siempre pretende devolver al hombre su raíz animal, que la respete y la defienda, que no la menosprecie ni la haga a un lado.

JUNTO A PEZ. En la Surfer Rosas, en la antesala al show de Pez, entre otras bandas, estuvieron las fotos que María eligió para exponer: “Fueron fotos de animales que acompañaron mis distintos caminos, viajando por el país, o andando en bicicleta por los barrios del Conurbano.

Por lo general, son animales que estuvieron conmigo, aunque sea por un breve instante. Todas tienen una larga historia atrás, y creo que es eso lo que me gusta de todas las fotos, mías o de cualquier otra persona", conclu

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