“Bullying”, teatro y circo con enseñanzas para los chicos
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Hoy sale a escena en Cultura del sur de temperley una obra que baja el mensaje de romper ciertos prejuicios y de aprender a compartir.
Luego de su estreno en el Teatro de Lomas, “Bullyng”, una obra de teatro y circo para los más bajitos y para toda la familia que aborda esta temática, sale a escena hoy y el próximo jueves en las tablas de Cultura del Sur de Temperley.
Esta puesta en escena es una creación colectiva de Pepa Córdoba, Maxi Ameijeiras, Chumaru Fierro y Daniel Licandro, los cuatro protagonistas de la obra, que abordan la temática del bullying a través de cuatro personajes y con la intención de dejar un mensaje.
“El bullying se ve en todos los ambientes en general, se trata de concientizar a los niños y darles un mensaje a ellos y a los padres. En el bullying influye mucho el entorno”, comenta Daniel Licandro sobre el mensaje que pretende bajar la obra.
Cada uno de los personajes tiene su propia personalidad y de ahí parte el conflicto de este infantil. “En la obra aparecen amiguitos, cada uno tiene sus características, uno es bastante egoísta, hijo de padres ricos, el niño que es bastante pobre es el hijo del barrendero de la escuela. También hay una niña que no tiene tiempo para jugar por la exigencia de sus padres y también está el que hace bullying”, acota el actor, que encarna a este último personaje.
Mientras que Pepa Córdoba, otra de las actrices de la obra, describe también estos personajes tan dispares. “Somos cuatro adultos que toman los roles de niños para mostrar cuatro tipos distintos de niños. Tenemos al egoísta, al humilde y al trabajador, a la estudiosa y al que le hace bullying a todos”, señala.
“La historia cuenta cómo los cuatro niños recorren una enseñanza y en el medio hacen números de tela, trapecio, cuerda, mimo y malabares. Se plantean cuatro enseñanzas: que hay que compartir para jugar, que se puede jugar con cualquier cosa, sin necesidad de ningún juguete en particular, que es muy bueno aprender muchas cosas, pero que hay que tener tiempo para jugar, ya que eso nos enseña valores”, agrega la actriz.
APRENDER A COMPARTIR
La obra coquetea con una suerte de Vecindad del Chavo, donde este personaje es el chico humilde y Quico es el de la clase más acomodada y que no quiere compartir sus juguetes con el resto de sus amigos.
“Suceden un montón de cosas adentro de la obra marcando cada personaje. El que es egoísta se va quedando solo por no compartir sus cosas con los demás y se da cuenta de que lo importante es compartir, por ejemplo, y el que discriminaba a todos y no quería jugar a algunas cosas porque eran de nenas termina haciendo un número de tela sin importarles los colores”, explica Daniel.
La idea de la puesta es que se rompan algunas barreras entre los chicos, que muchas veces se les marcan desde el afuera. “No hay que prejuzgar ni cargar a nadie, ya que al final somos todos niños que queremos jugar, ésta es la idea de la obra, un juego lleno de enseñanzas donde ellos mismos las razonan”, cierra Pepa.
Por Edgardo Solano
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