OPORTUNIDAD Puerto Arco Iris nació hace tres años. Los profes de carpintería y de arte los capacitan para crear artículos para vender al público.
"Queremos trabajar", es la primera frase que sale de la presidenta de la cooperativa de trabajo Puerto Arco Iris, Lucía Torres: hace tres años junto a su hermana Carolina comenzaron a pensar en un espacio de capacitación en oficios para personas con discapacidad.
Lo que fue una simple idea se fue haciendo realidad muy de a poco hasta que lograron instalarse en un espacio en Llavallol gracias al contacto con los exempleados de la fábrica Canale que ayudaron hasta hoy con el material para armar sus artículos para la venta.
"Comenzamos con el proyecto pensando en el futuro de mi sobrino que tiene autismo. En familia siempre se planteaba que puede pasar cuando Benicio tenga 18 años y termine con sus terapias. Por eso, crear un espacio para que él y muchos otros aprendan oficios nos pareció una opción que creamos ya que no hay alternativas para ese grupo de personas", comenzó contando la fundadora y actual responsable de la cooperativa que funciona a la vuelta de Cotramel en la mutual ubicada en 9 de Febrero 161, Llavallol.
A las hermanas Torres se unió María Rivero y actualmente en Puerto Arco Iris cuentan con seis operarios con distintas discapacidades y mayores de 18 años.
"Con Puerto Arco Iris apuntamos a brindar herramientas ya que los chicos cuentan con profes de carpintería y de arte que los capacitan para crear artículos para vender al público", especificó Torres.
Gracias al contacto con Cotramel que conocieron en el marco de empresas recuperadas es que se comienza a gestarse el proyecto de otra manera. "Ellos nos comenzaron a donar los pallet y lo que hacemos en la cooperativa es encargarnos de desarmarlos, cortarlos, lijarlos y convertirlos en distintos accesorios, objetos o artículos para el hogar", relató la fundadora.
También se encargan de pintar y dar vida a las latas que salen con fallas de Cotramel. "Junto a la profe de arte las pintan y crean sus diseños. Con eso confeccionan las bandejitas de desayunos o meriendas", recalcó.
LA IMPORTANCIA DE LA CAPACITACIÓN EN OFICIOS
Más allá de cumplir con el objetivo de capacitar y vender, confesaron que cada operario ha tenido un cambio enorme desde que comenzaron a trabajar en la cooperativa. "Ellos ahora tienen un oficio y gracias a eso obtienen autonomía económica porque son todos mayores de edad y eso los incentiva a tener más oportunidades", dijo Torres, y agregó que "no solo se llevan su oficio también cambian su calidad de vida".
Los operarios quieren vender, tener su sueldo porque se sienten útiles. Con sus propias manos pueden crear cosas increíbles. "Por eso, siempre destaco que han cambiado mucho desde que trabajan porque se sienten incluidos y fomentan su autoestima", recalcó Torres sobre estos años de trabajo en Puerto Arco Iris.
DIFUNDIR EL TRABAJO Y OBTENER MÁS OPORTUNIDADES
A lo que apuntan es que el proyecto crezca, que se de a conocer, que los vecinos puedan ayudar comprando los productos que venden y también buscan hacer algún trabajo tercerizado si hay alguna Pyme que quiera contar con los productos que Puerto Arco Iris fabrica.
"Hacemos distintos artículos como bandejas de madera, latas para azúcar, para yerba, ahora nos prestaron una máquina para sublimación y los chicos están haciendo tazas, remeras y gorras con el diseño que cada persona pida. Siempre se está pensando en crear productos nuevos y por eso nos gustaría llegar a trabajar para alguna empresa o pyme que nos llame", pidió la responsable del proyecto.
Los que son parte de este proyecto se encuentran trabajando en la cooperativa, los lunes, miércoles y viernes de 9 a 12 en principio y dependiendo del flujo de trabajo que tengan.
También se puede ver todo el catálogo de productos en @puertoarcoiris_ o para hacer alguna consulta o pedido a través del número de WhatsApp al 1173577286