CRIMEN MACABRO Será juzgada la expareja del hombre asesinado en Villa Galicia, en octubre del 2023. La mujer llamó al 911 y trató de engañar a la policía con una falsa entradera.
El juicio por el crimen de Juan Mangoni, el hombre asesinado a puñaladas y escondido dentro de un tanque de agua en el barrio de Villa Galicia, en Temperley, tiene nueva fecha de juicio, tras su última postergación.
Fuentes judiciales confirmaron a La Unión que la imputada será juzgada a partir del próximo 22 de agosto por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de Lomas de Zamora, por el macabro asesinato del vecino de 56 años, descubierto en octubre del 2023.
Adriana Patricia Luzuriaga, expareja de la víctima, es la única acusada, que en caso de ser encontrada culpable del delito de "homicidio agravado por el vínculo", podría ser condenada a prisión perpetua.
El caso se remonta a principios de octubre del 2023, cuando los efectivos policiales se presentaron en una vivienda ubicada sobre la calle Luis Sáenz Peña al 2100, donde la policía encontró el cuerpo del dueño adentro de un tanque de agua, sin vida y con varias heridas de arma blanca.
Todo comenzó con un llamado al 911 de una mujer de 50 años, le contó a los efectivos policiales que cuatro delincuentes encapuchados habían entrado a la casa a la madrugada para robarles, mientras ella y su pareja dormían.
Luzuriaga dijo que Juan intentó resistirse al robo y que durante una lucha con los ladrones, ellos lo mataron a puñaladas. Además, aseguró que la obligaron a ella a introducir el cuerpo en el tanque de agua de plástico que tenían en el patio.
Al escuchar su relato, los funcionarios policiales notaron contradicciones, y luego de las tareas desplegadas por la Policía Científica, llegaron a la conclusión de que, en realidad, había tratado de engañar a las autoridades.
Durante la inspección de la vivienda, los investigadores no encontraron signos de que las puertas hubieran sido violentadas, y comprobaron que la alarma había sido desactivada. Sin embargo, lo que terminó de complicar a la mujer fue el hallazgo de una notebook bajo la ducha abierta del baño: entendieron que era una maniobra para dañar la computadora donde se guardaban los archivos de las cámaras de seguridad.
Los peritos realizaron pruebas de luminol, establecieron que el crimen se había cometido en el living y detectaron sangre que no había llegado a ser limpiada debajo de los muebles.
Como si fuera poco, hallaron los celulares de la pareja tirados en el inodoro, cuando minutos antes la mujer había relatado que se los habían robado. Ante esta situación, la pareja de la víctima fue detenida y se encuentra tras las rejas hasta ahora, por pedido de la fiscal Marcela Juan, titular de la UFI 16 de Lomas.