entrevista El mediocampista cambió de posición y jugó como central en el Reducido, transformándose en un pilar de Los Andes tras un año en el que había jugado poco. "Pude demostrar que estoy a la altura", dijo.
Gonzalo Cozzoni fue uno de los referentes que tuvo Los Andes en el ascenso a la Primera Nacional y mostró toda su felicidad al remarcar que "se hizo justicia" por todo el "esfuerzo" que realizó el plantel durante toda la temporada de la Primera B, que contó con 50 partidos y muchos obstáculos que superó con solvencia.
"Como dice el refrán, todo al final tiene recompensa y creo que esto es un ejemplo de la perseverancia que tuvo el equipo, de haberse levantado de momentos difíciles. Creo que se hizo justicia. Y la verdad que estoy muy feliz", el remarcó el experimentado futbolista que encontró su lugar como marcador central y se convirtió en un pilar de este Los Andes que logró el ascenso tras cinco años en la Primera B.
En una entrevista con Diario La Unión, hizo un repaso de los momentos complicados que tuvo que transitar el equipo en la recta final de la temporada y destacó la fortaleza que mostraron para sacarlo adelante luego de lo que fue la caída ante Colegiales en la final por el primer ascenso.
"Ese fue un golpe duro porque había mucha expectativa y por eso también nos costó el primer partido del Reducido ante Deportivo Armenio, pero levantamos la cabeza rápido, nos pusimos de pie y dimos pelea. Y estuvimos a la altura. Creo que el equipo hizo un Reducido impecable y llegamos a la final con la misma expectativa que ante con Colegiales. Por suerte esta vez se dio para nosotros", remarcó Cozzoni.
Y en esa línea, el exjugador de Talleres de Remedios de Escalada agregó: "El grupo estuvo siempre igual, veníamos a entrenar con alegría y el núcleo que se generó era muy fuerte. Siempre vinimos con la mejor, ya que sabíamos que teníamos posibilidades en el Reducido. Éramos conscientes que si estábamos fuertes de la cabeza íbamos a ser un equipo duro. Lo que faltaba era demostrarlo en cancha. Y creo que la clave en el momento más duro fue que seguimos confiando en nosotros".
La felicidad para Cozzoni no se debe solamente a lo que significó en cuanto a lo grupal, sino también en lo personal, ya que le tocó jugar poco a lo largo de la temporada, pero sobre el final del año se convirtió en uno de los baluartes de este Los Andes, siendo el líder de la última línea. Y por eso este ascenso tiene un valor especial para él. "Es un premio a mi carrera", resaltó.
Y por último, concluyó: "No tuvo un buen año en el comienzo, pero yo siempre me sentí bien y empujé desde el lugar que me tocaba. Por suerte, desde la llegada de Leonado Lemos, tuve la oportunidad de jugar y pude demostrar que estoy a la altura. Y eso me pone muy contento".