EXAMINACIÓN El cotejo de ADN de los restos hallados con una muestra de la madre de la víctima confirmaron que se trata de la adolescente. Todavía no se sabe cómo murió.
La autopsia preliminar realizada en el marco de la investigación por el femicidio de Candela Azoya, confirmaron que son de la adolescente de 17 años los restos humanos encontrados en la estación de trenes Kilómetro 34 del Tren Roca.
Fuentes judiciales informaron a La Unión que por medio del cotejo de ADN de una muestra de la madre de la víctima, establecieron "preliminarmente" que los restos hallados son de la joven descuartizada. Sin embargo, todavía no se pudo establecer como la mataron.
"No se sabe como la mataron, porque la parte que se encontró, no tenía ningún signo", señalaron a este medio. Los asesinos, se encargaron de desaparecer el cuerpo de Candela, y no se pudo encontrar el torso, a pesar de los rastrillajes que se hicieron. "Se autopsió las partes que se encontraron, que son un cráneo, cabellos, cuero cabelludo, y un pie con un hueso", remarcaron sobre la examinación de las partes del cuerpo.
Por ahora, la causa a cargo de la UFI 12 de Lomas de Zamora cuenta con dos detenidos y dos sujetos prófugos, que son buscados por la Justicia. No obstante, no hay novedades sobre su paradero desde que se fugaron del barrio tras el crimen.
Candela había pactado la compra de unas zapatillas y salió de su casa el 27 de noviembre pasado, para ir a buscarlas a la Plaza San Marta, pero no regresó, y su familia denunció su desaparición. Finalmente, dos días después, se enteraron de que su cuerpo había sido hallado descuartizado y quemado dentro de una bolsa en la estación Kilómetro 34.
Horas después empezaron a saberse más datos gracias a testimonios de vecinos. Relataron que la menor había sido vista el mismo día, acompañada por un hombre y una mujer, caminando sobre la calle Copihue con sentido hacia Voltaire. La investigación determinó que ese hombre habría sido su primo Carlos, de 22 años, mientras que la mujer era su novia.
Por otro lado, la Policía realizó un allanamiento en un domicilio de la calle Terrada al 2900. Se cree que Candela habría llegado a esta casa acompañada justamente por su primo. El lugar, presuntamente usado como búnker de drogas, era frecuentado por dos hermanos, quienes son señalados por la familia como los asesinos de la joven.