RECLAMO Pidieron la detención del acusado y expresaron su temor a una posible fuga. Además, exigieron que el hermano de la víctima sea entrevistado en Cámara Gesell.
Familiares de Demian, el nene de 7 años que murió baleado por su tío policía en Llavallol, presentaron un petitorio para pedir la detención del acusado, quien fue excarcelado días atrás, aunque sigue imputado por el hecho ocurrido en febrero pasado.
En el documento, al que accedió La Unión, la familia paterna del menor fallecido expresó su preocupación ante una posible fuga del acusado, y el "entorpecimiento de la investigación". Además, solicitaron que el hermano de Demian sea indagado en Cámara Gesell, cuyo testimonio podría ser clave, como testigo presencial del caso.
"También solicitamos que la familia Ancona sea comunicada directamente de todos los movimientos y decisiones relevantes en la causa judicial", agregaron, entre otros pedidos. Sin embargo, ésta fue rechazada en los Tribunales de Lomas de Zamora.
Este miércoles, se presentaron en fiscalía, luego de la elevación a juicio de la causa, que todavía no tiene fecha, aunque sería en los próximos meses. Mientras tanto, el sujeto que sería juzgado espera en libertad.
En su declaración indagatoria, el hombre aseguró que limpiaba una pistola Bersa calibre 9 milímetros hasta que se le escapó un tiro que impactó en el cuello de su sobrino, quien murió trágicamente. Sin embargo, esto fue desmentido por la familia paterna del niño, que rechazan la teoría del accidente.
Además, las pericias y testimonios complicaron la situación judicial del policía, ya que las pruebas permitieron desacreditar su versión. Por eso fue detenido por orden de la jueza de Garantías 6 de Lomas, Laura Ninni. No obstante, un giro en la causa le otorgó la excarcelación.
"El asesino está libre. Pésimo. Se trata de un asesinato, es muy doloroso todo esto. Lo queremos preso y que digan la verdad, tiene que pagar lo que hizo", se había quejado Laura, tía de Demian, en diálogo con este medio, apenas conocida la noticia del fallo favorable para el policía.
El terrible hecho sucedió a mediados de febrero, cuando el oficial estaba de franco de servicio. Se trata de un joven de 21 años que cumplía funciones en la Dirección Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) de la Policía Bonaerense.
El nene fue trasladado de urgencia al Hospital Llavallol, pero la herida había sido tan grave que los médicos no pudieron salvarle la vida.