golpe al bolsillo Si hasta el 30 de junio el Gobierno no pospone la suba prevista del impuesto a los combustibles, la actualización del tributo en el surtidor sería de 115%.
De no mediar acción del Gobierno para volver a posponer o modificar la forma de actualización prevista del Impuesto a los combustibles líquidos, a partir del 1° de julio estos deberían actualizarse un 115% y el impacto en el surtidor llegaría al 18%.
De esta manera, considerando el valor al día de hoy de un litro de nafta súper, esta actualización del tributo de julio, llevaría el litro de nafta super en la ciudad de Buenos Aires a $1068.
Si bien aún el Gobierno no dio señales claras de que decisión tomará, se estima que habrá algún tipo de ajuste respecto a la actualización por el fuerte impacto inflacionario que implicaría actualizar todos los períodos en un solo mes, teniendo en cuenta que tocan los períodos con mayores niveles de inflación.
Esta intervención no sería nueva para el Gobierno ya que ya había anunciado a través del Decreto 375/2024 la postergación de la actualización de los impuestos sobre los combustibles líquidos y el dióxido de carbono hasta el 1 de junio de 2024 y luego, buscando tener menor impacto en la inflación, volvió a alterar el cronograma de actualización del impuesto mediante el decreto 466/24.
Según explican desde el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el nuevo decreto estableció que las actualizaciones que corresponden por la inflación del cuarto trimestre del año 2023 y del primer trimestre del 2024, se realicen a partir del primero de julio.
Por lo tanto, en julio el tributo tendría un incremento de alrededor del 115%, elevándose desde $143 hasta $306 por litro. Luego, de acuerdo a la ley 23.966 este tributo coparticipable de monto fijo se actualizará trimestralmente en enero, abril, julio y octubre de cada año de acuerdo a la inflación correspondiente al trimestre calendario que finalice el mes inmediato anterior al de la actualización que se efectúe.