SENTENCIA Recibieron la pena máxima por delitos de Lesa Humanidad cometidos en cuatro centros clandestinos de detención. Además, hubo otra condena a 25 años y un absuelto.
El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata comunicó el veredicto del Juicio Brigadas, proceso que juzgó los delitos de Lesa Humanidad cometidos en el Pozo de Banfield, el Infierno de Lanús, el Pozo de Quilmes y la Brigada de San Justo durante la última dictadura cívico-militar. Diez represores fueron condenados a prisión perpetua.
Poco después de las 14, el juez Ricardo Basílico empezó a leer los nombres de todas las víctimas de las atrocidades cometidas en los cuatro centros clandestinos de detención incluidos en este juicio. "Estos casos resultan constitutivos de crímenes de lesa humanidad y así deben ser calificados", remarcó el magistrado, y consideró que "los hechos, además de resultar crímenes de lesa humanidad, lo fueron en el marco de un genocidio".
Acto seguido, el juez comunicó la sentencia contra los 12 imputados, quienes no estuvieron presentes en la sala y siguieron el juicio por videoconferencia. Hubo 10 condenados a prisión perpetua, uno a 25 años de prisión y un absuelto.
El veredicto fue el siguiente:
Prisión perpetua para Federico Minicucci, exjefe del Regimiento de Infantería Mecanizado N°3 de La Tablada.
Prisión perpetua para Guillermo Alberto Domínguez Matheu, exjefe de Actividades Psicológicas del Destacamento de Inteligencia 101 del Ejército en La Plata.
Prisión perpetua para Carlos Gustavo Fontana, excapitán del Destacamento 101 del Ejército en La Plata.
25 años de prisión para Alberto Julio Candioti, exjefe de la Sección Comando y Servicio del Destacamento 101 de Inteligencia del Ejército.
Prisión perpetua para Jorge Héctor Di Pasquale, exjefe de Sección de Operaciones Especiales del Destacamento 101 de Inteligencia del Ejército.
Prisión perpetua para Carlos María Romero Pavón, exjefe de la Sección Reunión Interior del Destacamento de Inteligencia 101 del Ejército.
Prisión perpetua para Roberto Armando Balmaceda, exjefe de la Central de Reunión del Destacamento 101 de Inteligencia del Ejército.
Prisión perpetua para Jaime Lamont Smart; exministro de Gobierno bonaerense.
Prisión perpetua para Juan Miguel Wolk, exdirector de Investigaciones Zona Metropolitana de la Policía Bonaerense y exjefe del Pozo de Banfield.
Absolución para Enrique Augusto Barre, exsegundo jefe de la División Delitos contra la Propiedad de la Dirección de Investigaciones.
Prisión perpetua para Jorge Antonio Bergés, exmédico de la Dirección de Investigaciones.
Prisión perpetua para Luis Horacio Castillo, exoficial inspector de las Brigadas de Investigaciones de Banfield y Lanús.
En el fallo, el tribunal consideró los delitos de privación ilegal de la libertad, amenazas, aplicación de tormentos, abuso sexual, desaparición forzada de personas, homicidio en concurso real con delitos de Lesa Humanidad, reducción a la servidumbre, aborto forzado y sustracción, retención y ocultación de menores. El próximo 5 de julio se informarán los fundamentos del fallo.
Tras comunicar la sentencia, el juez Basílico pidió que el Cuerpo Médico Forense realice "informes periciales" sobre la salud de todos los condenados, para comprobar "el impacto que tendría su estadía en un establecimiento penitenciario". Esto responde al pedido de "cárcel común" que habían hecho las querellas durante los alegatos, ya que salvo Di Pasquale (preso en Campo de Mayo), todos los imputados están con prisión domiciliaria.
El Pozo de Banfield, centro clandestino de detención que funcionó en Siciliano y Vernet, fue un símbolo del terrorismo del Estado que atemorizó a la comunidad de Lomas de Zamora durante la última dictadura cívico-militar. Casi 50 años después de aquellos crímenes y tormentos, se cierra uno de los capítulos más oscuros de la historia argentina.