todo mal La participante tuvo una larga charla con Rosina sobre el rol que juega Juliana dentro de la casa y sobre cómo se complica la convivencia.
La casa de Gran Hermano está que arde y Rosina quedó mal luego de una especie de extorsión que le hizo Isabel por la fuerte presencia de Juliana dentro de la casa.
La joven uruguaya contó su preocupación por la reacción que tuvo la sommelier con ella cuando "no avaló" hacer una suerte de campaña para que Furia sea eliminada.
"Ella se va a ir cuando se tenga que ir, es lo que ustedes no entienden", le dijo la uruguaya a su compañera de Gran Hermano.
"¿O es lo que vos no entendés? Que ella se tiene que ir", respondió Isabel, asegurando que Furia "los está envenenando a todos" y que su dolor de estómago es por tener que convivir con la polémica jugadora.
Isabel continuó a Rosina y le dijo que "15 de 20 personas" quieren que se vaya Furia de la casa, y la uruguaya respondió que ella también quiere que Juliana dejé la competencia.
"Y contame entonces, pelotuda, porque si no pienso que sos una tibia", le contestó Isabel a Rosina. "Si sos tibia me desilusionarías, yo siempre te acobijé y te traté con mi corazón. Si sos tibia, me alejo. No quiero saber que vos estás del lado que no tenés que estar", agregó.
Luego de la charla, la joven quedó mal con todo lo que le dijo Isabel y habló con Joel, que la consoló y le recomendó no creer en todo lo que le dijo la sommelier.
Más tarde, Isabel le dijo a Rosina que "es enojona" y que su vínculo no depende netamente de lo que piense sobre Furia. "No te tomés tan literal lo que te digo, yo las cosas la digo seria", le dijo a la uruguaya.