ALEGATOS El fiscal Bettini Sansoni desestimó las pruebas presentadas y desistió de acusar al médico. Los jueces anunciaron un cuarto intermedio hasta la próxima.
El fiscal Jorge Bettini Sansoni desestimó la acusación contra Pablo Ghisoni, el obstetra y ginecologo del Sanatorio Juncal de Temperley juzgado por abuso sexual de dos de sus hijos, mientras que las abogadas de la madre de las víctimas pidieron 10 y 20 años de prisión, por cada uno de los casos.
Ambas partes se presentaron durante la primera jornada de alegatos de este jueves, que terminó parcialmente con un cuarto intermedio anunciado por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Lomas de Zamora hasta el viernes 25 de agosto, cuando le toca el turno a la defensa.
Según pudo averiguar La Unión, durante su exposición, el representante del Ministerio Público Fiscal consideró que los delitos atribuidos al imputado no habían sido probados con las pruebas producidas durante las seis jornadas de declaraciones desarrolladas a partir del 3 de agosto.
También desestimó el testimonio de la víctima, al aducir el Síndrome de Alienación Parental (SAP), al considerar que su discurso estaba "contaminado".
Por su parte, la querella pidió 20 años de prisión por el delito "abuso sexual con acceso carnal reiterado agravado por el vínculo y la convivencia en el caso de una de la víctima" y 10 años por "abuso sexual gravemente ultrajante" por el caso del otro hijo del imputado.
La denunciante, Andrea Vázquez, expresó su bronca en redes sociales a través de diferentes comunicados: "Fiscal Jorge Bettini Sansoni no acusó a Pablo Ghisoni, imputado por abuso sexual, dirigiendo sus alegatos a señalar de loca a la mamá protectora. La valoración de la prueba fue arbitraria, desoyendo pericias que confirman los delitos y haciendo alusión al inexistente SAP".
La mujer se separó en 2009 de quien era entonces su pareja, y lo denunció por violencia hacia ella y sus hijos. Sin embargo, recién cuando pudo volver a convivir con dos de ellos en 2016, cuando hizo la denuncia por abuso sexual de los menores.
A lo largo de estos años, en los que Ghisoni estuvo detenido preventivamente y en los últimos tiempos internado en un centro de salud, tanto el propio imputado como familiares directos y amigos rechazaron las acusaciones y las atribuyeron a un cuadro de inestabilidad emocional de la madre, a quien acusaron de haberse apropiado de los niños.
Incluso, el hijo mayor de la pareja declaró públicamente que la historia de los abusos es consecuencia de una estrategia inducida por la madre de los niños.