Luz, cámara, acción La actriz protagoniza "Las fiestas", una película de Ignacio Rogers, junto a Dolores Fonzi, Daniel Hendler y Ezequiel Díaz.
Cecilia Roth indagó en su propia maternidad y en los vínculos con amigos para construir su personaje en Las fiestas, película de Ignacio Rogers, que se estrena este jueves en salas del país con un elenco que incluye a Dolores Fonzi, Daniel Hendler y Ezequiel Díaz.
"Somos amigos, somos familia también, dijo la actriz en referencia al reparto de la cinta y al realizador. Ensayamos mucho, porque con Dolores habíamos trabajado y somos muy cercanas. Yo acá tenía que hacer de su madre, con lo cual había que hacer un 'click' porque me siento más su par que su madre, dijo entre risas la experimentada intérprete.
La actriz interpreta a María Paz, una mujer que luego de sufrir un infarto siente un deseo irrefrenable de pasar Navidad y Año Nuevo con sus tres hijos, con quienes tiene una relación entre distante y tirante.
"Empecé a trabajar mi propia maternidad con mi propio hijo con ellos. Y a recuperar momentos, instantes, sensaciones de mi propia maternidad con mi hijo con ellos. Pero además es un personaje muy particular en su maternidad como lo somos todas las madres. En los ensayos se fue terminando de amoldar una cosa muy familiar de reconocernos, de ponernos cada uno en el lugar de hijo, porque las relaciones de amistad también a veces sos hijo, a veces sos padre y a veces sos hermano, comentó Roth.
Disparatada, graciosa, avasallante y dominante. Todos esos extremos tuvo que transitar la actriz para darle vida a un personaje al que ninguna dimensión le queda estática. Manipula a sus tres hijos desde el personaje de Hendler, que es el que no le puede decir que no. Pero también se aferra a su nieta, hija del personaje de Fonzi, quien adopta su maternidad de una manera bastante desentendida.
"Está bueno alejar a los personajes de uno -explicó- porque tenés la posibilidad de construir una vida paralela, algo armado por ti y con otros actores, porque también la actuación es adaptación a lo que le pasa al otro. Me parece que eso es fundamental. Entonces también terminás de colocarte en el lugar cuando estás con el otro o la otra. Pero los personajes siempre son otros, es otro ser humano distinto, porque podés decir que se parece a vos, pero no; cada uno viene de una historia distinta.
Roth ya había aceptado trabajar en Las fiestas sin haber leído el guion. La escritura, según contó, duró unos siete años, durante los cuales siempre le decían que había un proyecto para presentarle y que nunca le llegaba. La amistad que los une brindó la confianza para poder llevar adelante esta película rodada en exteriores y que maneja el humor con el mismo rigor que la tensión.