Y SON PADRES En el Día de los Enamorados, los lomenses Germán Catelli y Romina Sansile contaron su historia y recordaron el momento en el que sus caminos se cruzaron.
Cupido hizo su trabajo y los unió, pero el arte también es un gran protagonista en la historia de amor de los lomenses Germán Catelli y Romina Sansile. Él es músico y ella es dibujante y retratista, pero también amante del rock, lo que hizo que sus caminos se cruzaran y hoy sean una misma familia. En este Día de los Enamorados, contaron la historia de cómo se conocieron en 2006 y cómo es su vida actualmente: son padres y tienen grandes proyectos por delante.
"Yo solía ir a bailar con mis amigas y también íbamos a ver bandas de rock. Un amigo que tocaba en un grupo nos dijo que iba a presentarse en Arte Pagano, que estaba en Boedo y San Martín, y cuando llegué lo vi a Germán, que era parte de la banda. Fue un flechazo", empezó a contar Romina sobre aquella noche en la que conoció a quien hoy es su compañero de vida.
Cuando nos conocimos, yo era músico y Romi ya se dedicaba al dibujo. Creo que fue una de las razones por las que comenzamos a entablar una conversación.
"Cuando nos conocimos, yo era músico y Romi ya se dedicaba al dibujo. Creo que fue una de las razones por las que comenzamos a entablar una conversación", acotó Germán. A través del tiempo, el arte los fue uniendo cada vez más y es una de las tantas actividades que comparten a diario.
Romina descubrió su pasión y su gran técnica con el dibujo en la adolescencia, donde sus compañeros del colegio le pedían que haga distintas ilustraciones para regalar: "Después conocí una amiga que hacía retratos, me gustó la técnica y la implementé hasta la actualidad. El primer retrato que hice estuvo relacionado al rock y fue el de Axl Rose, el cantante de los Guns N' Roses".
Germán, por su parte, siempre fue un enamorado de la música y de la guitarra, y a los 14 años ya formaba parte de una banda. El lomense admitió que siempre pensó que ese fanatismo iba a ser un impedimento para coincidir con otro amor, el sentimental con otro ser humano, pero esa noche en Arte Pagano se dio cuenta que estaba equivocado.
La relación es un ensamble perfecto para no dejar de hacer lo que nos gusta respecto al arte y, por supuesto, siendo padres de Julieta, pretendiendo que sea feliz tomando el camino que ella elija.
"En un parate, nuestro amigo en común nos presentó y después yo ya quería que termine el show para seguir hablando con Romina", admitió, entre risas, Germán.
"Al principio no imaginé que íbamos a llegar hasta donde estamos ahora, pero a medida que fueron pasando los días sí que lo deseaba", admitió Romina, mientras que Germán aseguró que la relación es "un ensamble perfecto para no dejar de hacer lo que nos gusta respecto al arte y, por supuesto, siendo padres de Julieta, pretendiendo que sea feliz tomando el camino que ella elija".
Para finalizar, y con 16 años de enamoramiento a flor de piel, ambos dejaron un mensaje para todas las parejas lomenses: "Hay que dejarse llevar, ésa fue una de las claves. Por supuesto, estamos agradecidos al arte por haber permitido que nos conozcamos y encaremos una vida juntos".