TOC N°7 Familiares del hombre de 35 años asesinado por Gabriela Roxana Abaca, su pareja, se mostraron "disconformes" y advirtieron que el hecho "amerita una dura condena".
"Estamos disconformes", fue lo primero que reconocieron desde la familia de Daniel Romero (35), el hombre que fue asesinado por su pareja en Fiorito, luego de que la Justicia condenara a la mujer a 13 años de prisión.
"Aunque percibimos positivo el hecho de la condena y el saber que la asesina permanecerá detenida, consideramos que la pena debe ser mayor", indicó César Romero, primo de Daniel, en diálogo con La Unión.
La última semana, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°7 de Lomas condenó a Gabriela Roxana Abaca (25) a 13 años de prisión por el delito de "homicidio", que tuvo lugar el 11 de noviembre de 2018 en una vivienda de Estados Unidos al 300, en el barrio de Fiorito.
"La muerte de una persona a manos de su pareja, y en el contexto de violencia que sufrió Daniel por parte de su novia, amerita una dura condena. Es una mujer que permanentemente lo maltrataba física y psicológicamente, y luego termino asesinándolo de manera brutal. Por tanto, apelaremos el fallo", explicó el primo de la víctima.
Pese a que habían pedido perpetua para Abaca, el TOC N°7 dispuso 13 años de prisión. "Estamos firmes, de pie, siempre apelando a la Justicia a pesar de todo. Somos una familia que cree en la ley, una familia ajena a la violencia", sostuvo César.
"El asesinato de Daniel fue un duro golpe. Él era un hombre joven, vital, que tenía mucho por delante. Gabriela, la asesina, le quitó una persona de gran corazón a muchos. Un amigo, un hijo, un primo, un sobrino, un padre. Hoy sus hijas y sus hijos crecen en el dolor. El tiempo no borra la pérdida de un papa que lo daba todo por ellos", enfatizó.
"Hoy sus hijas y sus hijos crecen en el dolor. El tiempo no borra la pérdida de un papa que lo daba todo por ellos."
Y agregó: "Hoy hay una madre que llora a su único hijo día y noche, que lo busca sumergida en la negación de la realidad con la esperanza de que todo sea una horrible pesadilla y poder reencontrarse con él para abrazarlo. Daniel nos falta a todos, por eso, más que nunca, tenemos que estar fuertes, de pie, y seguir buscando justicia por los medios que corresponden".
En la mencionada fecha, Abaca apuñaló a Romero tras una discusión. Luego de ser llevado al hospital Evita, de Lanús, falleció como consecuencia de la herida. Ella, por su parte, fue detenida días después, cuando intentaba huir a otra provincia.
"Con su familia no tuvimos relación en ningún momento, salvo un intento aislado de contacto por parte de una persona vía Facebook con mi padre. Pero jamás hablamos con alguien ni mantuvimos contacto alguno. A la familia no la conocíamos hasta los hechos en cuestión, y en ningún momento cruzamos palabra alguna", dijo César.
En tanto, expresó que "a pesar del crimen atroz que cometió Gabriela, contra la familia Abaca" no tienen "ningún tipo de resentimiento ni de desprecio". "Ellos no tienen la culpa de tener un monstruo en su familia", recalcó.
"Ellos no tienen la culpa de tener un monstruo en su familia."
Finalmente, César ratificó que la familia creé "en la Justicia y en la objetividad de la misma". "Hay elementos suficientes para una condena acorde a los hechos", completó, en charla con este medio.
La causa fue llevada adelante por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°6 de Lomas, a cargo de la fiscal Mabel Adriana Lois. Mariana Monti, de la Unidad de asistencia y colaboración para el Juicio común y el Juicio por Jurados, participó del debate.