Judiciales La defensa destaca que "no hay ninguna prueba que vincule" al acusado con el hecho, y apunta a una nueva investigación sobre la intervención de los médicos previo a la muerte de la joven.
El pedido de elevación a juicio de la causa que trata el crimen de Daiana Castillo fue apelado por parte de la defensa de Ezequiel Mego, el único detenido por el hecho.
Así lo precisó Cristian De Fazio, el abogado defensor, en diálogo con La Unión. Vale recordar que la fiscal Silvina Estévez, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°4 de Lomas, había solicitado la elevación a juicio el mes pasado.
De Fazio, en este sentido, explicó que "no hay ninguna prueba que vincule" al acusado con el hecho, y que él llega a esta instancia "de una manera muy particular, muy llamativa".
"Un perfil de Facebook se contactó con uno de los denunciantes y le indicó que esta persona es culpable del hecho. Luego de que al principio no pareció muy convencido, fue y lo denunció, pero las características físicas no coinciden entre las dadas en la declaración y las de mi defendido, por ello el reconocimiento no sería valido", explicó.
En este sentido, el abogado defensor pide "que se de a conocer a través del IP quién fue la persona que está detrás de esta cuenta" que inculpó al joven, y "traerla a declarar y que explique por qué el acusado fue la persona culpable, según él".
"Es la única prueba que se le señala a nuestro asistido. No hay otros elementos que indiquen que fue autor del hecho", recalcó, en charla con este medio.
Por otra parte, De Fazio indicó que a Mego "se le imputa el homicidio en ocasión de robo" y, más allá de que la defensa discute la autoría del hecho ya que "probó donde estaba el acusado al momento de lo ocurrido", hay "otra arista".
"Se le imputa la muerte cuando se abrió una investigación paralela en la UFI 10 de Lomas que investiga los homicidios culposos por la posible responsabilidad médica, y ese no es un dato menor a tener en cuenta", completó.
EL HECHO
La madrugada del domingo 7 de junio de 2020 Daiana y su amiga Marilú estuvieron empaquetando ropa que vendían a través de redes sociales hasta la una y media de la mañana. Luego las pasó a buscar un amigo y salieron a comprar.
Franco era quien manejaba la moto, Marilú y Daiana iban atrás, en ese orden. A la altura de Espronceda y Puerto Argentino, se les atravesó sorpresivamente un auto. Franco logró esquivarlos, pero la segunda vez perdió el control y cayeron al suelo. Daiana salió volando contra el cordón, Marilú quedó tendida en la calle y Franco del otro lado.
En ese instante, uno de los ocupantes del auto salió y le apuntó con un arma a Franco. Quería la moto. Marilú intentó sacarse el casco y reincorporarse, y le apuntaron a ella. Daiana miraba toda la situación a pocos metros. Cuando de repente giró cabeza, vio que el Fox daba marcha atrás y se le venía encima. Le aplastó una de las piernas.
Pero no todo terminó ahí. La joven se arrastró contra el cordón como pudo para zafarse, pero el auto volvió a acelerar y la pasó por arriba por segunda vez. En el barrio se escucharon los gritos de dolor. "¡No, por favor, basta!", exclamó Daiana. Era tanta la desesperación de la joven que los vecinos se despertaron y salieron a ver qué pasaba.
Ese mismo domingo Daiana estuvo en el Hospital Gandulfo y los médicosle realizaron curaciones. Tenía una herida profunda en la entrepierna, pero no había ninguna ginecóloga disponible para tratarla. A las 14 recibió el alta.
El lunes lloraba del dolor. Su madre le limpiaba la herida y le salía pus. El martes la tuvieron que llevar de nuevo al hospital y la operaron. "Nos dijeron que tenía una infección terrible, la anestesiaron y la intubaron", contó Alicia en ese momento a La Unión. Sufrió tres paros y se murió el miércoles.