UN LUCHADOR A Thiago Alegre le gusta asistir a primer grado con la virtualidad. El Municipio le donó elementos para que pueda continuar con sus aprendizajes en pandemia.
Thiago Alegre tiene seis años y es un guerrero de mil batallas. Ya desde chico sufrió problemas de visión y a los tres años quedó ciego, en parte por un tratamiento para el trasplante de uno de sus riñones. Las ganas de Thiago por aprender en el colegio son muy fuertes y, a pesar de que la pandemia complicó sus tareas cotidianas, encontró una solución y una esperanza gracias al Municipio: le donaron una pizarra, un punzón y hojas con el sistema Braille, con el objetivo de que Thiago aprenda a leer y escribir. "Su voluntad en todo lo que hace me demuestra que no debo bajar los brazos", dijo Angélica Rodríguez, la mamá y otra guerrera.
Desde los cuatro meses de vida, el lomense Thiago Alegre ya mostraba algunos signos de problemas en la visión: tenía unas manchas rojas en sus ojos, que fueron tratadas a tiempo con estimulación visual. Pero cuando tenía tres años perdió totalmente la vista, a causa de un tratamiento de diálisis que realizaba para poder ser trasplantado de un riñón. "El tratamiento era muy fuerte, siempre le dolía la cabeza y fue el detonante para que él deje de ver", explicó Angélica Rodríguez, la mamá Thiago y una luchadora que lo acompañó y lo cuidó en los momentos adversos.
Thiago asiste a primer grado en la Escuela N°65, muy cerca de su casa ubicada en el barrio de Santa Marta, y tiene muchas ganas de aprender. Pero la suspensión de las clases presenciales por la pandemia, sumado a la virtualidad y a que varios de los materiales son visuales, hicieron que Thiago tuviera complicaciones para progresar. "Todo fue muy nuevo para mí y la tecnología a veces me supera. Él es muy inteligente, le gusta el colegio y aprende rápido las tareas que le mandan", contó la mamá, que rápidamente dijo que, gracias a las búsquedas por voz de Google, Thiago se las rebusca para incorporar contenidos a su vida.
El Municipio, a través de la Subsecretaría de Educación, se hizo presente y le entregó una pizarra, un punzón y hojas, todo adaptado al sistema Braille, para que Thiago pueda empezar a practicar la lectura y la escritura.
El Municipio, a través de la Subsecretaría de Educación, se hizo presente y le entregó una pizarra, un punzón y hojas, todo adaptado al sistema Braille, para que Thiago pueda empezar a practicar la lectura y la escritura. "Estoy muy contenta por el gesto y por las posibilidades de estudiar que va a tener Thiago. También nos van a mandar una maestra para que lo ayude en lo que necesite", detalló Angélica sobre otro gran gesto por parte de las autoridades locales.
Su voluntad en todo lo que realiza me hace ser más fuerte, me muestra a diario que no debo bajar los brazos.
"Thiago fue trasplantado hace diez meses y su vida cambió rotundamente. Estoy acostumbrada a pelearla junto con él y verlo radiante es una inyección de energía", dijo Rodríguez acerca de otra de las tantas luchas que debió afrontar y ganar su hijo. Para finalizar, con un claro tono de voz emocionado, dijo: "Su voluntad en todo lo que realiza me hace ser más fuerte, me muestra a diario que no debo bajar los brazos".