Monumentos que homenajean a las madres en su día

RECONOCIMIENTO Existen tres en Lomas, ubicados en la Grigera, en la Plaza de Turdera y la del Campeón, en Banfield. Alberto Gallardón y Antonio Nevot, sus creadores.

"Tito" se encargó de restaurar la obra de su padre.

La plaza de Turdera, otro espacio que homenajea a las madres.

Banfield tiene el suyo en la Plaza del Campeón, en Vergara.

El Monumento a la Madre estará devuelta en la Grigera.

Hoy se celebra en Argentina el Día de la Madre, una fecha muy especial pero que se da en un contexto atípico, justo cuando la pandemia priva el contacto, el abrazo y el beso. De todas formas, existen en Lomas dos monumentos para reconocer a las mamás de todos, esos seres que darían lo que fuese por un hijo. Eduardo "Tito" Gallardón contó cómo su padre, el artista Alberto Gallardón, llevó a cabo hace más de medio siglo el Monumento a la Madre, que estaba emplazado en la Grigera y que, debido al vandalismo, el mismo "Tito" reacondicionó. Además, el rotario Néstor Garreti habló de otra obra relacionada a las madres, en la Plaza del Campeón, en Banfield.

El Monumento a la Madre es una de las cuatro esculturas ubicadas en la Plaza Grigera, junto al del bombero, el del Monseñor Schell y "Remordimiento". Todas son obras del mismo autor: Alberto Gallardón, un apellido con renombre en la localidad, quien es el único artista de Sudamérica en tener cuatro obras en un mismo espacio verde. Con 2,20 metros de alto, posee un enorme simbolismo para representar a la mamá de todos. Está hecha completamente de bronce, pero los primeros pasos para confeccionarla fueron con arcilla y yeso. El Club de Leones de Lomas fue quien le encargó a Alberto la tarea de confeccionar la obra para la plaza principal de la localidad.

Con 2,20 metros de alto, el Monumento a la Madre de la plaza Grigera posee un enorme simbolismo para representar a la mamá de todos. Está hecha completamente de bronce, pero los primeros pasos para confeccionarla fueron con arcilla y yeso. El Club de Leones de Lomas fue quien le encargó a Alberto la tarea de confeccionar la obra para la plaza principal de la localidad.

"Por el vandalismo, estaba destruida y la tuve que arreglar. Me costó muchísimo dejarla nuevamente en condiciones. Hay que tener en cuenta que mi papá la hizo hace aproximadamente 50 años", dijo Eduardo "Tito" Gallardón, su hijo, que también está ligado al arte gracias a la música (tiene un dúo de folclore llamado "Los Comechingones") y que con el paso de los años aprendió sobre pinturas y esculturas. A modo de homenaje, puso en condiciones varias obras de su padre.

Ahora que ya está arreglada, va a emplazarse en el mismo lugar, con la madre mirando hacia la avenida Yrigoyen. Lo distinto es que va a ir rodeada con una reja, para que no le hagan más daño.

"Ahora que ya está arreglada, va a emplazarse en el mismo lugar, con la madre mirando hacia la avenida Yrigoyen. Lo distinto es que va a ir rodeada con una reja, para que no le hagan más daño", señaló el artista, con un gran entusiasmo por devolverla al lugar que se merece. Sin olvidarse, agradeció gentilmente el espacio que le prestaron los bomberos de Lomas y Banfield para restaurar la escultura.

Pero ese no es el único monumento dedicado a la madre que realizó Alberto Gallardón. En la Plaza Turdera existe otra obra con la misma temática, pedida por el Rotary Club de dicha localidad. "A esa escultura la cuidan demasiado y uno siempre valora esos gestos", agradeció Eduardo.

La obra en la Plaza del Campeón estuvo a cargo del escultor Antonio Miguel Nevot. Durante mucho tiempo hubo gestiones para trasladarla a la iglesia Sagrada Familia, por temor al vandalismo, pero por suerte eso nunca ocurrió y sigue en el lugar.

Néstor Garreti pertenece al Rotary Club de Banfield Este desde 2014 y contó como la institución decidió, entre 1957 y 1958, emplazar otro monumento a la madre en la Plaza del Campeón, en la calle Vergara: "La obra estuvo a cargo del escultor Antonio Miguel Nevot. Durante mucho tiempo hubo gestiones para trasladarla a la iglesia Sagrada Familia, por temor al vandalismo, pero por suerte eso nunca ocurrió y sigue en la plaza".

"Recuerdo que, durante muchos años, cada Día de la Madre se ponía una ofrenda floral y se hacía un pequeño acto. Sería lindo poder reactivar esa costumbre y homenajear a todas las madres argentinas", concluyó Garreti.

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