River no pudo en los penales y Gimnasia avanzó a la final
Por la copa argentina. Luego de empatar 2-2, el Lobo fue más preciso que el Millonario en la definición desde los 12 pasos y se impuso por 5-4 en una de las semifinales. Ahora, el equipo de Gallardo debe ganar la Libertadores para jugar la Copa 2019.
Martínez, de lo mejor de River, complicó por su sector.
Gimnasia, con presión y sólido en defensa, tuvo la receta del éxito.
Mientras aguarda por la definición de la Copa Libertadores ante Boca, River no pudo con Gimnasia en las semifinales de la Copa Argentina y quedó eliminado del certaman, del cual era bicampeón. Tras empatar 2-2 en los noventa minutos, el Lobo estuvo más fino en los penales y se quedó con la clasificación.
Al Millonario le costó entrar en partido y le resultó complicado imponer condiciones ante un Gimnasia que pisó el Minella con un plan claro. El equipo de Pedro Troglio le tejió un duro partido, con un sólido trabajo defensivo y tapándole bien los espacios, y gracias a eso controló las acciones en los primeros minutos, pero sin inquietar a Armani.
La historia cambió a los 30 minutos cuando Martínez, de tiro libre y con la colaboración de Martín Arias, puso el 1-0. River ya era más, estaba más fino en los pases y comenzó a dominar. Sin embargo, Gimnasia respondió rápido y a los 33 minutos, y luego de una floja respuesta de Armani ante un tiro de Tijanovich, Faravelli empujó el balón en libertad y estableció el 1-1.
A partir de ahí, el partido se hizo de ida y vuelta. Y en ese contexto, el Millo se sintió más cómodo y tuvo dos claras: un remate dentro del área de Fernández y otro de Palacios. Gimnasia, que sufrió la roja de Bonifacio por dos faltas a Martínez, avisó con un disparo de Silva que pasó muy cerca.
En el segundo tiempo, el equipo de Gallardo golpeó de entrada con un gol de Pratto, que recibió de Fernández y definió bien ante la salida del 1, pero no lo pudo sostener. Y a los 14, tras la roja que recibió Pinola por un codazo, Silva ganó en el área tras un tiro libre de Ayala y puso el 2-2.
Con el empate, Gimnasia reforzó su labor defensiva, se protegió mejor y no le dio muchos espacios a River, que no se sintió cómodo con ese planteo y perdió claridad con el correr de los minutos, faltándole fineza en el último toque. Y en ese contexto, una de las pocas claras fue un cabezazo de Pratto que exigió una buena respuesta del Martín Arias tras un tiro de esquina. Antes y después de eso, poco y nada.
Por eso, todo se definió en los penales. Y en esa contienda, Gimnasia estuvo más fino y se impuso por 5 a 4 para dejar en el camino al Millonario (fallaron Pratto y Maidana) y meterse en la final de la Copa Argentina.
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