Oscar Martínez, en una comedia dramática sobre la muerte

Luego de un intenso rodaje entre España y Buenos Aires, este jueves llega a las salas la nueva película que tiene a Oscar Martínez como protagonista: “Yo, mi mujer y mi mujer muerta”, una coproducción argentino-española dirigida por el europeo Santi Amodeo.

La película, cuyo elenco completan Carlos Areces, Ingrid Garcia-Jonsson y Malena Solda, sigue los pasos de Bernardo, un arquitecto y catedrático de la Universidad de Buenos Aires, quien, tras enviudar, se niega a cumplir el último deseo de su difunta esposa: ser incinerada y que sus cenizas se arrojen al mar en la Costa del Sol, en España, donde ella nació y donde solía volver a pasar un mes al año con su hermana. Luego de que unos vándalos ataquen la tumba de su mujer, Bernardo entra en shock y decide ir a España para esta vez sí, cumplir su voluntad.

En un viaje lleno de encuentros y desencuentros, conoce a Abel, dueño de una inmobiliaria a punto de quebrar, al que su ex ha echado de casa y que vive en las casas vacías que alquila; y a Amalia, una relacionista pública de belleza declinante y ternura casi maternal, que adora el lujo.

Entre los tres tratarán de deshacerse de las cenizas y, en el recorrido para cumplir la hazaña, Bernardo se dará cuenta que no conocía a su mujer tanto como imaginaba.

Sobre el guión, Martínez señaló, al diario El Tribuno: “La primera vez que lo leí me gustó muchísimo. Que un hombre tan seguro de sí mismo, casi soberbio, con un narcisismo tan alto, y convencido de que conocía mejor que nadie a su mujer (que siempre estuvo a la sombra de él y con quien había tenido un matrimonio extraordinario) termine comprobando -con ella ya muerta- que todo eso no era como creía, es lo suficientemente potente y está muy bien estructurado como para que te lleve solito”.

en el viaje a españa conoce al dueño de una inmobiliaria a punto de quebrar y a amalia, una relacionista pública de belleza declinante.

Y agrega: “Aparentemente “ella no era todo lo que imaginaba y hasta tenía reparos muy serios para él. Luego, enterarse de que la mujer tenía una especie de doble vida y que había estado a punto de abandonarlo por otro. Lo más interesante de todo es que este hombre, amén del viaje físico, que es largo, hace fundamentalmente un viaje interno e impresionante. Termina comprendiendo, aceptando y amando a su mujer, igual o más que antes”

La película es producida por Film Tonic, productora argentina que participó de grandes éxitos como Relatos Salvajes (2014), El Clan (2015) y Cien años de perdón (2016), y las españolas AZ Films y Películas Grupo Tranqu