La Unión | SOCIEDAD

OIT explicó las diversas formas de trabajo forzoso en el mundo

.

OIT

OIT

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) explicó que el trabajo forzoso adopta diversas formas, como la servidumbre, el tráfico y otras maneras de esclavitud, en tanto las víctimas son los más débiles, es decir, mujeres y niñas obligadas a prostituirse, migrantes atrapados en servidumbre por deudas y los empleados clandestinos.

Casi 21 millones de personas son víctimas de ese flagelo: 11,4 millones de mujeres y niñas y 9,5 de hombres y menores y, unas 19 millones de víctimas, son explotadas por individuos o empresas privadas y más de dos millones por el Estado o grupos rebeldes.

De esos explotados por individuos o empresas, 4,5 millones son víctimas de explotación sexual forzosa, indicó el organismo.

"Aquellos que imponen o promueven el trabajo forzoso generan ganancias ilegales enormes. El trabajo doméstico, la agricultura, la construcción, la manufactura y el entretenimiento figuran entre los sectores más afectados. Los trabajadores migrantes y pueblos indígenas son especialmente vulnerables a esa realidad", señaló.

Los nuevos datos publicados por la OIT estiman en casi 21 millones el número total de trabajadores forzosos en el mundo, por lo que tres de cada mil personas son víctimas de esa situación.

Esas nuevas cifras ayudarán a elaborar las respuestas políticas globales para que cese el crimen del trabajo forzoso moderno.

De acuerdo con el Convenio 29 sobre trabajo forzoso de la OIT, el empleo forzoso u obligatorio es toda tarea o servicio exigido a cualquier persona bajo amenaza de alguna pena y para el cual ese individuo no se ofrece de manera voluntaria, explicó el organismo.

Ello puede verificarse cuando el trabajo es impuesto por las autoridades del Estado, empresas privadas o individuos.

El concepto de trabajo forzoso abarca a un gran número de prácticas coercitivas de labor, que se producen en todos los tipos de actividad económica y en todas las regiones del mundo.

Los Convenios del organismo laboral tripartito sobre trabajo forzoso son el 29 y 105, adoptados en 1930 y 1957.

El primero (sobre el trabajo forzoso) lo define y determina ciertas excepciones, incluyendo el servicio militar obligatorio, obligaciones cívicas, el trabajo necesario para enfrentar una situación de emergencia y el de las cárceles bajo condiciones.

El segundo (abolición del trabajo forzoso) añade una obligación específica para los Estados, que prohíbe la imposición de empleo forzoso u obligatorio como medio de coerción o de educación política, como castigo por expresar esas opiniones o participar en huelgas, la movilización de la mano de obra para el desarrollo económico, como medida de disciplina laboral o discriminación racial, social, nacional o religiosa, añadió la OIT.

Ambos fueron ratificados casi a nivel universal, lo que significa que casi todos los países están obligados por ley a respetar sus disposiciones y a informar periódicamente sobre su aplicación a los órganos de control de las normas de la OIT.

"No estar sometido al trabajo forzoso es un derecho humano. Todos los Estados miembro de la OIT deben respetar el principio de su eliminación, hayan o no ratificado los Convenios", agregó.

La trata de seres humanos también puede considerarse como trabajo forzoso y, por lo tanto, las estimaciones de la OIT abarcan a todas las formas de trata o de esclavitud moderna.

La única excepción son los casos de extracción de órganos, adopciones o matrimonios forzados, salvo que resulten en ello.

El trabajo forzoso es distinto a las condiciones laborales de explotación o por debajo de la norma y, los indicadores que determinan cuándo una situación equivale a esa situación, son la limitación de la libertad de movimiento de los trabajadores, la retención de los salarios o de los documentos de identidad, la violencia física o sexual, las amenazas e intimidaciones o deudas fraudulentas de las que los empleados no pueden escapar.

El trabajo forzoso puede ser consecuencia del desplazamiento interno o transfronterizo de trabajadores vulnerables a la contratación fraudulenta o a las prácticas coercitivas y también afecta a las personas en sus zonas de origen, sean nacidos en servidumbre o esclavitud o manipulados para realizar esa tarea.

El trabajo forzoso incluye a los servicios sexuales forzosos y, exigir ese tipo de trabajo, también constituye un delito pe

Temas Relacionados