“Menos consumo es menos trabajo y menos crecimiento para todos”

El intendente de Lomas, Martín Insaurralde, se mostró “muy preocupado” por la situación económica que atraviesan miles de familias y consideró que “el gobierno de la Provincia no tiene un plan de contingencia” para revertir este escenario.

La situación económica que atraviesa el país golpeó muchos hogares en el último año y el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, se mostró “muy preocupado” por la caída del consumo en la provincia de Buenos Aires y los efectos que esto puede traer aparejado a futuro.

“Menos consumo significa menos recaudación de los municipios, menos trabajo, menos obras y servicios y menos crecimiento para todos los bonaerenses”, aseguró. Luego de que la consultora privada Kantar Worldpanel diera a conocer un estudio que da cuenta que ocho de cada 10 familias restringieron sus compras en los supermercados, Insaurralde consideró que “el gobierno de la Provincia no tiene un plan de contingencia para revertir esta situación”.

En este sentido, pidió a las autoridades que convoquen a los intendentes “para discutir en conjunto alternativas de reactivación”. Con una inflación anual cercana al 40% y una caída del salario real del 7% promedio sólo en el sector formal, el consumo masivo cayó un 4% en el último año. Los argentinos van más seguido al supermercado, pero compran menos.

Por si eso fuera poco, la dieta de los sectores medios y bajos cambió: carnes y lácteos pedieron presencia en la mesa y ganaron terreno las pastas. “Hoy pasa que las familias no pueden comprar lo mismo, que los comerciantes se sienten ahogados, que los pequeños y medianos productores la están pasando mal”, señaló el intendente, al poner el foco en la disminución en la compra de los productos de primera necesidad.

“No sólo se enfría la economía, sino que se está poniendo en riesgo el bienestar y la calidad de vida de la gente”, planteó.

JUNTO A LA GENTE. Asimismo, Martín reclamó a las autoridades provinciales que “dejen de mirar índices y vayan a las casas de cualquier laburante y abran la heladera”. “En el Conurbano bonaerense es tremendo el impacto negativo del modelo implementado. Miles de personas consumen mucho menos que antes”, dijo.

Y habló de las consecuencias a mediano y largo plazo si la situación no cambia cuanto antes en el territorio bonaerense: “Los problemas atraviesan todos los rubros y complican seriamente la recaudación de los municipios, que tienen que limitar la cantidad y calidad de los servicios que brindan a los vecinos