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Barrio Enz cierra el año con cancha nueva

Apoyo del Municipio. Ya comenzaron las obras y el club dejará atrás la tierra para pasar al cemento. Además, con un subsidio, planean construir un SUM.

Barrio Enz tendr cancha nueva en las próximas semanas

Barrio Enz tendrá cancha nueva en las próximas semanas.

Las historias de superación de los clubes de barrio tras la cuarentena e iniciando la "nueva normalidad" empiezan a conocerse. Después de ocho meses complicados, se aventuran buenas noticias y se renuevan ilusiones.

El Club Barrio Enz de Llavallol empezó noviembre con buenas noticias. Por primera vez, dejarán atrás la tierra y pasarán a tener una cancha propia de cemento. A través del Municipio se iniciaron las obras para la construcción de la losa en donde los equipos del club podrán jugar: en los últimos días se llevó a cabo el alisado y nivelación del terreno con maquinaria específica y pronto se le dará forma al armazón de hierro donde se colocará el material.

"La cancha de atrás está concesionada con el buffet y con esta obra pasaríamos a tener nuestra propia cancha. Toda la vida fue de tierra y ahora va a pasar a ser de cemento, que es algo muy importante para el crecimiento del club", señaló Claudio Robles, presidente de la institución. Por estos días, el club además espera la confirmación de un subsidio del Municipio para la construcción de un SUM.

Ubicado en una zona humilde de Llavallol, el Barrio Enz es una entidad 100% social donde no se le cobra a nadie por realizar actividades deportivas pero, principalmente, se busca insertar a los jóvenes en grupos sanos y alejados de la calle. "La realidad es que tratamos de sacar a los chicos de las malas juntas, que puedan tener un lugar seguro, alejado de las drogas o de las cosas malas que tiene la calle. Este es un barrio con sus características y lograr que los chicos entrenen y se motiven con el deporte es muy positivo para ellos. Apuntamos a generar un sentido de pertenencia, a promover nuevas generaciones que sigan junto al club", contó Claudio, que está al frente del Enz desde hace ocho años.

Allí desde hace algunos días ya se encuentran haciendo prácticas físicas, con distancia social y cumpliendo con todos los protocolos. "Veíamos que ya estaban jugando al fútbol en la calle y preferimos abrir el club con todos los cuidados para que por lo menos estén acá. Practicamos en grupos de a seis o siete chicos, sin contacto y puntualizando en lo físico", detalló.

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