Anahí Benítez: testigos complicaron a Marcelo Villalba, uno de los imputados

AVANZA EL JUICIO. Una mujer y una joven dijeron haber sido acosadas por él. Además, otra testigo señaló que vendía drogas.

Marcelo Villalba imputado por el secuestro la violación y el asesinato de Anahí

Crédito: Juan Cicale.

Marcelo Villalba, imputado por el secuestro, la violación y el asesinato de Anahí.

Este martes por la mañana se llevó adelante la séptima audiencia del juicio por el femicidio de Anahí Benítez. Dos testigos describieron conductas inadecuadas de Marcelo Villalba, uno de los imputados por el secuestro, la violación y el asesinato de la joven en Lomas de Zamora en 2017.

La primera en declarar fue Daniela Avitabile, quien brindó su testimonio por videoconferencia. Contó que conoció a Villalba en 2010, cuando ella trabajaba en el boliche Capítulo I de Lanús, y que desde ese momento, él la acechaba frecuentemente de una manera muy extraña.

"Se empezó a aparecer en todos los lugares adonde yo iba. Se me aparecía en la parada del 51 cuando me iba a trabajar. Iba al centro de Lomas y se me aparecía. También se me apareció en la Costa cuando me fui con mis amigas a San Bernardo", relató Daniela ante los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal Nº7 de Lomas.

"Se me acercaba con el pretexto de que vendía una obra social. A mí nunca me interesó. Aparecía de traje, bien vestido. Su intención no era adherirme a la obra social. Yo me doy cuenta cuando un hombre se acerca con otra intención", añadió la testigo, que en aquel momento fue advertida por su madre sobre la conducta de Villalba: "Mi mamá me insistía que no era normal. Las casualidades eran muy raras".

En aquel entonces, Villalba había logrado conseguir el Facebook de Daniela, la agregó como amiga y empezó a acosarla con mensajes. "Él siempre andaba con otro chico. Me mandaron solicitud, los tenía como amigos. Villalba me mandaba mensajes, pero yo no le contestaba. No tenía ningún vínculo. Años después, cuando nació mi nena, me mandó un mensaje con felicitaciones".

Más tarde, declaró Camila Andrade, amiga de una hija de Villalba. Al igual que Daniela, aseguró que el imputado la acosaba por redes sociales y su testimonio empeoró todavía más la descripción del perfil del imputado, ya que ella era menor de edad cuando ocurrieron los hechos.

"Yo tenía 13 años y me comentaba en una foto que estaba hermosa y que no le diga nada a la hija. No lo tenía como amigo, yo tenía el Facebook público", sostuvo Camila ante los jueces.

Por otro lado, la docente Adriana Prado, quien trabajó en la ENAM (colegio al que iba Anahí) se acercó a declarar y contó una situación muy particular que vivió con su entorno familiar: "Estábamos mirando las noticias y escuchamos que uno de los imputados era Villalba. Mi sobrino dijo que lo conocía, que era al que vendía droga cerca de la escuela", señaló. Acto seguido, sus sobrinos confirmaron esta versión ante los jueces.

Cabe señalar que Villalba es quien tiene las pruebas más contundentes en su contra. Cuando se hicieron las pericias allá por 2017se había encontrado ADN de Villalba en el cuerpo de Anahí y se comprobó que él la había violado.