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Hace 100 años nacía la escritora Olga Orozco

Entre libros. Oriunda de La Pampa, comenzó a publicar sus poesías desde muy joven e incursionó en el periodismo y la radio, al margen de ser tarotista y astróloga.

Hace un siglo, el 17 de marzo de 1920, nacía la escritora Olga Nilda Gugliotta Orozco, conocida simplemente como Olga Orozco, en Toay, La Pampa, la hija menor del matrimonio de un inmigrante siciliano y de una pampeana.

Cuando ella tenía ocho años, la familia se trasladó a Bahía Blanca junto a toda su familia y cuando contaba con dieciséis se instaló en Buenos Aires, donde estudió en la Facultad de Filosofía y Letras, y obtuvo el título de docente.

Empezó a escribir poesía desde muy joven, por sus 18 años, y fue una de las integrantes del grupo literario surrealista Tercera Vanguardia, al cual pertenecía también Oliverio Girondo. Colaboró en la revista Canto que dirigía su primer esposo el poeta Miguel Ángel Gómez y fue parte la denominada Generación del 40.

En Canto aparecieron publicados sus primeros poemas, que dirigía su primer esposo, el poeta Miguel Ángel Gómez. También incursionó en el mundo radiofónico en la Radio Municipal y Radio Splendid como crítica teatral.

Se instaló en Buenos Aires, estudió en la Facultad de Filosofía y Letras, y obtuvo el título de docente.

Trabajó en periodismo empleando varios seudónimos y dirigió, también, algunas publicaciones literarias, como en los ‘60 cuando fue redactora en la revista Claudia.

En otra de sus facetas, fue tarotista, tirando las cartas desde su juventud, y astróloga, estando a cargo del horóscopo del diario Clarín durante los años 1968 y 1974.

Luego de la ruptura de su primer matrimonio, en 1965 se casó de nuevo, esta vez con el que sería su gran amor, el arquitecto Valerio Peluffo.

Su poesía tiene siempre un valor iniciático que le venía en parte de la influencia de Sor Juan Inés  Juan de la Cruz, Arthur Rimbaud, Gérad de Nerval, Charles Baudelaire, Czesław Milosz y Rainir Rilke.

SU OBRA. Entre sus principales libros se destacan “Desde lejos” (1946), “Las muertes” (1952), “Los juegos peligrosos” (1962), “Museo salvaje” (1974), “Veintinueve poemas” (1975), “Cantos a Berenice” (1977), “Mutaciones de la realidad” (1979), “La noche a la deriva” (1983) y “Eclipses y fulgores” (1998).

En 1998 se publica la antología “Relámpagos de lo invisible”, con selección y prólogo de Horacio Zabaljáuregui. Y en 2012, posterior a su muerte, su “Poesía completa”, al cuidado de Ana Becciú con prólogo de Tamara Kamenszain. Esta edición incluye toda su producción poética y una serie de ensayísticos.

Fue galardonada en 1964 con el Primer Premio Municipal de Poesía; el Premio Nacional de Poesía, en 1988 y el Premio de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores, en 1989. En 1995 obtuvo en los Estados Unidos, el Premio Gabriela Mistral, otorgado por la OEA, y en 1998, el Premio Juan Rulfo en México.

Olga Orozco falleció de un paro cardíaco a los 79 años en la noche del domingo 15 de agosto de 1999, en el Sanatorio Anchorena, en Buenos Ai

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