Menos visitantes, paridad de ventas y frenesí ante booktubers y el fenómeno Germán

Un fenómeno que no es literario pero copó la feria con una desbordada firma de ejemplares que se extendió por unas 10 horas y alcanzó picos legendarios de histeria colectiva, con niños llorando y gritando y el cierre de las boleterías del lugar.

Libreros y editores coincidieron en que este año se distinguió por contar con cerca de un 10 por ciento menos de visitas", es decir que si en 2015 se acercaron al porteño predio de Palermo un millón 200 personas, este año las tendencias indican que lo habrían hecho algo así como un millón de lectores y curiosos.

Pero “Germán distorsiona todo, ahora la feria está cerrada, no se venden más entradas, la semana pasada vendimos 28 mil ejemplares de “#chupaelperro” y 5.500 luego”, explicó Florencia Ure, directora editorial del Penguin Random House, descontando los mil ejemplares que vendió del mismo libro el stand de la Librería Cúspide.

Sumado al efecto Vargas Llosa -la presencia del Nobel de 80 años colmó una sala para 1500 personas ante un público que lo rondaba en edad y disparaba cámaras a rollo en una de las noches más frías de la feria- Random es el único sello que superó las ventas 2015: “con ‘Cinco esquinas’, su última novela, tenemos un 19 por ciento de ventas arriba”, indicó Ure, a lo que se añade otro nombre bestseller, el de Florencia Bonelli, con “Bajo el signo de acuario”.

En Cúspide, Alejandro Costa, encargado de la librería, fue contundente: "Hoy es el día que más gente se acercó a la feria, que estuvo muy floja. Se vendió un cinco por ciento menos, la gente viene menos y gasta menos aunque Germán vendió mil libros en 10 días; junto a la novela romántica 'Yo antes de ti', de Jojo Moyes”.

Mario Varga Llosa, booktubers y youtubers fueron los invitados más esperados, los fans del escritor pasaron anoche más de hora y media haciendo fila para verlo; los jóvenes lectores y 'comentaristas' virtuales convocaron más de mil niños y adolescentes; y el youtuber del momento logró que abrieran para su firma de libros un pabellón reservado tradicionalmente para Sociedad Rural.

Frenesí al que se acoplaron fanáticos de sagas juveniles como "Witches", de Tiffanis Calligaris; o los libros "La quinta ola", de Rick Yansey; y "Reino de sombras", de Sophie Jordan, quien firmó en la Carpa Blanco especialmente preparada para la ocasión.

A estos favoritos se agregó otro novel, el sudafricano J.M Coetzee y, entre las presentaciones más asistidas, las de la española Milena Busquets, la chilena Pilar Sordo e Ismael Cala, de la CNN en español.

Los jóvenes fueron sin duda los protagonistas del encuentro: Desde V&R Editoras, Georgina Dritsos dijo a Télam que "hubo mucha gente en días y horarios determinados, como los viernes sábados y domingos, y la feria se veía más activada de 18 en adelante estos últimos días. Las ventas fueron parecidas al año anterior y los libros más vendidos fueron el nuevo de Jordan y la saga ‘Maze Runner’, de James Dashner; ambos juveniles".

Desde El Ateneo, Gaciela Bruno señaló que "este año se ve menos asistencia de público general, aunque hubo mucha participación durante las jornadas profesionales de libreros y distribuidores del exterior ya que el libro argentino ahora tiene un precio más competitivo en dólares para poder venderlo".

“Las ventas fueron similares a las de 2015, con la novedad de que entre los más vendidos se encuentra la colección Arterapia de pintura para adultos, el volumen seis de la juvenil saga 'Assassin´s Creed', y álbumes infantiles de diseño especial, pero el feeling es que hay un poco menos de gente aunque el fenómeno de la literatura juvenil va ‘in crescendo’”, consideró Bruno.

Maximiliano Tonomi, de la distribuidora Waldhuter, contabilizó "un poco menos gente que el año anterior y ventas más o menos iguales o un poco más abajo. El libro más vendido es 'Pedro Melenas', cuentos ilustrados alemanes para adultos de Henrich Hoffman, y 'Para escribir bien el español', de María Marta García Negroni”; al tiempo que destacó “el Programa Librero Amigo, porque faciltó y alentó las compras”.

Raúl Robledo, encargado del stand de Planeta, señaló que "la venta de libros se mantuvo igual que el año anterior” y que el más vendido fue “'El cerebro argentino', libro del neurólogo Facundo Manes.

Desde el Fondo de Cultura Económica, Cleopatra Caglieris fue tajante: "Menos gente, menos ventas. El día de ayer se vendió menos que el mismo día del año pasado. Aunque la presencia de la Comisión Nacional de Biblioteca Populares (Conabip), en nuestro caso, nos haya subido mucho las ventas”.

Los más solicitados, contó Caglieris, “ fueron 'El abecedario a mano', de Isol; 'Ramón preocupón', del inglés Anthony Brown, y 'Escribir textos científicos y académicos', de Marta Marín", en tanto destacó "los beneficios a los libreros del interior, aunque no los haya para la gente que trabaja aquí".

Eduardo Velázquez, de Ediciones de la Flor, indicó que "la feria estuvo bien, más o menos igual que el año pasado pero con muchos menos bibliotecarios. La gente circuló menos que el año pasado y los títulos más pedidos fueron los de Mafalda, Gaturro y SZoka".

Lo mismo ocurrió en Siglo XXI que notaron menos ventas y menos público que aprovechó sobre todo ofertas y arrasó con títulos como “Cazador de historias”, el ultimo de Eduardo Galeano; “Los 3 kirchnerismos”, de Matias Kulfas; “Diálogos sin Corbata”, de Axel Kicillof; y “Las neuronas de Dios”, de Diego Golombek.

Mientras que desde Colihue remarcaron que la gente no compró tanto en efectivo, “casi todo con tarjeta y aprovechando las promociones de Ahora 12 y del Banco Provincia”; y desde el local de Dickens remarcaron “ventas menores pero un notorio el cambio a principios de mayo, cuando la gente cobró, y empezó a moverse más”.

El movimiento en la juvenil Zona futuro fue notable: Julián Aznar (hijo de Pedro Azanar) agitó el avispero con una presentación de metálica y electrónica. También break dance y hasta barra de tragos de Cynar. El lugar más desestructurado de la feria, mucha gente fue al stand porque sabía de las actividades. Estaban chochos con esta edición.

Entre los independientes, los más vendidos en Los siete logos -grupo que reùne entre otros a Caja Negra, Beatriz Bitervo y Adriana Hidalgo- fueron “Las tres vanguardias”, de Ricardo Piglia; y “Los píxel de Cézanne”, de Wim Wenders.

Sólidos Platónicos, otro grupo de sellos que desde hace tres años se presenta en colectivo, rescató su presencia en la feria como “una buena manera de proyectarse con la que los lectores y el público ya se identifica”, dijo Paula Wolkowicz, de la editorial Libraria.

Entre otras curiosidades y joyitas, el mítico editor Daniel Divinsky recomendó visitar el local de La Coop, compuesto por 13 sellos que participaron por primera vez de la feria -China, Paisanita, Alto Pogo, Nudista, Proyecto VOX, Añosluz, Santos Locos, Conejos, Audisea, ¿Qué diría Víctor Hugo?, Mágicas naranjas y Espacio Hudson-; y el libro “Nunca más” fue el más vendido de Eudeba, sello de la Universidad de Buenos Aires (UBA).