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La revancha no se corre del 22

Copa Libertadores. Pese al rumor informal que llegó a Luque, los dirigentes de la Conmebol ratificaron la fecha de la revancha en La Bombonera, no accediendo a un cambio de fecha.

Desde hace más de un mes, la Conmebol fijó las fechas para las semifinales de la Copa Libertadores de América. En la llave de los equipos argentinos, River-Boca se estableció que jugaran el 1° de octubre en el estadio Monumental -como aconteció- y la revancha tres semanas más tarde, el 22 en La Bombonera, donde se definirá a uno de los finalistas.

Después del partido de ida, en el que el Millonario se impuso por 2-0 con goles del colombiano Rafael Borré, de penal, e Ignacio González, comenzaron a correr ciertos rumores sobre un posible cambio de fecha para el desquite en pos de correrla de las cercanías de la elección nacional que se celebrará el 27.

No existió un pedido formal, pero sí llegó la noticia a los pasillos del edificio de la Conmebol en la ciudad paraguaya de Luque. Los dirigentes de la casa madre del fútbol sudamericano descartaron de antemano la posibilidad, a pesar de la insistencia en el diálogo.

Detrás de una fecha hay diversos compromisos. Un factor trascendente es que la transmisión del encuentro fue vendida a más de 100 países que a su vez comercializaron la correspondiente pauta publicitaria y anuncian el clásico para el 22 de octubre. También argumentan cuestiones relacionadas a la organización.

Antes de la confirmación del 29/8, a través de un comunicado, la Confederación había advertido que la designación de las fechas no iba a ser flexible. “El calendario de competencias de la Conmebol fue aprobado por el Consejo, representado por sus 10 Asociaciones Miembro, y publicado en octubre de 2018 a fines de dar claridad y previsibilidad a todos los grupos de interés previo al inicio de las competencias. Adicionalmente, las fechas del calendario de competencias fue socializado con los Directores de Competiciones de las 10 Asociaciones Miembro el 27 de mayo de 2019, en reunión celebrada en Buenos Aires previo al inicio de la Segunda Fase de las competencias de clubes”, indicaba el escrito.

Ante la negativa de un cambio de fecha, todo quedó igual. Boca y River jugarán la revancha el 22. Y el ganador estará en la final del 23 de noviembre en Santiago de Chile contra el vencedor de los brasileros Flamengo-Gremio, que empataron 1-1 en Porto Alegre.