Ezequiel Muñoz, puertas adentro
Lanus. El futbolista de Lanús eligió convivir en la casa de su padres, mientras su mujer pasa los días con su familia en Italia, donde la situación es muy grave.
El panorama no es igual para todos. Algunos pasan la cuarentena en familia, otros la sufren por la distancia que los separa. Uno de estos últimos casos lo padece el marcador central de Lanús Ezequiel Muñoz, que dejó su domicilio particular para aislarse con sus padres, mientras su mujer voló hacia Italia -uno de los países con mayor índice de muertos y contagiados- para permanecer junto a los suyos.
"Mi mujer volvió a Italia la semana pasada, me cuenta que las cosas están muy complicadas. Allá, en Italia, tienen cuarentena hasta el (viernes) 3 de abril, pero seguramente va a prorrogarse. Lo mismo pienso que va a pasar acá en Argentina", sostuvo el de Pergamino en diálogo con la Oral Deportiva.
Muñoz conoció a su pareja en Italia, donde estuvo jugando siete años cuando de Boca juniors fue transferido al Palermo (2010-14). Luego pasó por Sampdoria (2015) y Genoa (2015-17) para más adelante emigrar a España para jugar en Leganés (2017-19).
Siguiendo con el relato, el jugador de 29 años comentó: "Me contó que Roma es una ciudad fantasma, una cosa es imaginárselo y otra es vivirlo. Están cerrando los bancos, los kioscos, la situación es aún más crítica que antes".
"Es dificilísima esta situación, me vine a lo de mis viejos pero no es una casa muy grande. Estamos transpirando un poco con los ejercicios que nos da el profe (Lucas Vivas)", finalizó uno de los puntales de la defensa Granate contando su momento personal mientras cumple diariamente los trabajos que les encomendó el cuerpo técnico de Luis Zubeld
