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En el Amalfitani, River venció a Vélez y superó un duro examen

por la fecha 17 de la Superliga. El Millonario le ganó por 2-1 al Fortín de visitante y sumó su segundo triunfo en fila para dejar en el olvido la pequeña racha negativa con la que arrancó el año. Y con esto se acerca a los puestos de copa.

River está de vuelta. Y este domingo, ante Vélez, lo ratificó con una valiosa victoria 2-1 ante el difícil Fortín de visitante, donde el local sumaba 14 partidos sin perder, para escalar en la tabla de posiciones y sumar su segundo triunfo en fila.

En el primer tiempo, el Millonario no se sintió cómodo y Vélez, que juega bien y tiene jugadores muy interesantes,  le manejó la pelota. Y a su vez tuvo las situaciones más claras, entre ellas un penal fallado por Salinas a los 26 minutos y que podría haber cambiado la historia del encuentro.

Eso no pasó. Y River respiró. Es que a lo largo de los primeros 45, generó poco y no pudo quebrar la resistencia de la defensa del Fortín, que mostró firmeza y marcó bien a Pratto y Borré.

Sin embargo, en el inicio del complemento, el equipo de Heinze no logró sostenerlo y el de Gallardo, en la primera que tuvo, no lo perdonó: gran pase de De La Cruz entre los defensores y exquisita definición de Borré para ponerse en ventaja en un reducto difícil.

El de Liniers lo pudo empatar en la segunda siguiente, pero Cufré definió alto y desperdició la más clara. Después de eso, River comenzó a justificar la victoria con juego y a los 40 lo consolidó cuando Quintero, de penal, puso el 2-0 al aprovechar una infracción de Giménez (se fue expulsado) ante Suárez para darle una victoria que, a pesar del descuento de Barreal, no corrió demasiado riesgo.

Con esto, el equipo millonario ratificó su recuperación en un duro examen, el cual puede ser importante de cara al futuro, y además le cortó un invicto 14 partidos en el José Amalfinatini para aumentar la confianza en la recta final de la Superliga.

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