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Banfield superó a Godoy Cruz y respira en los promedios

Superliga.

Apareció el Taladro de Falcioni. Con orden y sacrificio, le ganó a Godoy Cruz por 2-0 con goles de Junior Arias y Julián Carranza y se despegó de la zona caliente del descenso.

En la tierra del sol y el buen vino, Banfield tuvo motivos para festejar. El Taladro, que arrancó el partido en zona de descenso, venció por 2-0 a Godoy Cruz y respiró.

Los tres puntos, tras cuatro fechas de sequía (cinco contando la eliminación de la Copa Argentina), le permitieron superar a Rosario Central, Patronato de Paraná y Aldosivi de Mar del Plata en la tabla de los promedios. Además, convirtió un gol luego de 398 minutos y ganó por tercera vez en el Malvinas Argentinas sobre cuatro victorias en el historial frente al Tomba. Jornada más que positiva.

El cuadro de Falcioni dominó el juego, pero le costo generar peligro. El local, con menos posesión, tuvo más situaciones producto de desatenciones del rival y la floja tarea de Conde en las alturas. El arquero salió mal en el gol anulado a Jacquet (adelantado Alanís cuando Arias intentaba despejar en la línea) y en otra le cometió penal a Cardona, no sancionado por el árbitro Dóvalo. A favor, tuvo un mano a mano ante Vella, al que también le sacó un remate abajo, y de aliado al travesaño ante Breitenbruch.

Pero Banfield, que insinuaba y no lastimaba, juntó a Bertolo con Arciero, centro del lateral y cabezazo letal del uruguayo Arias contra el palo derecho de Mehring. Primer grito del oriental con la camiseta Albiverde y un alivio más que importante para el equipo.

Ese gol influyó positivamente en el ánimo banfileño, que salió al complemento con más vocación y voracidad. Carranza tuvo el segundo a la salida de un córner, pero entre el arquero y el travesaño lo privaron. Poco después, el delantero que seguirá su carrera en el Inter de Miami se sacó la bronca. Penal de Cardona a Bertolo y definición sutil del cordobés para ahuyentar fantasmas y creer que la vuelta al triunfo era una realidad.

Godoy Cruz intentó como pudo, pero no comprometió a Conde. La visita no pasó sofocones y en el último cuarto de hora, se vio la mano de su entrenador moviendo el banco. Damonte, Lenis (en menor medida) y el "Galgo" Gutiérrez para defender el triunfo. El 4-4-2 con el sello de JCF volvió a dar resultados. Esos que necesita Banfield para consolidar la idea futbolística y convertirse en un rival molesto para los rivales.

Se ganó, no importan las formas, pero cumplió con tres puntos. Y lo que viene, San Lorenzo con dos derrotas al hilo, es el paso siguiente para reafirmar que lo conseguido en Mendoza tiene que ser el eslabón de una cadena de resultados positivos y alentadores.

https://youtu.be/KtxltgT

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