Argentina no jugó bien y recibió un cachetazo de Venezuela

En el regreso de Lionel Messi, la Selección Argentina no redondeó un buen partido, fue superada en distintas facetas del juego y perdió por 3-1 con Venezuela, en un partido amistoso disputado en Madrid, España.

El elenco nacional no jugó bien, mostró falencia en todos los sectores y fue superado por el rival. La línea de tres defensores no funcionó, estuvo muy expuesta, y el equipo de Dudamel, con delanteros muy rápidos, lo aprovechó, especialmente en el primer tiempo, para irse al descenso con una ventaja de dos goles.

El primer golpe, el que expuso las dudas en defensa, fue a los 6 minutos: luego de un pelotazo desde la mitad de la cancha, Rondón picó entre medio de los centrales y, tras un gran control, puso el 1-0.

Con la ventaja, no se replegó. Fue por más. Y ayudado por  una Argentina lanzada al ataque, complicó de contra, con un mano a mano que Armani le tapó a Marchís y un cabezazo desviado de Rondón. Pero la tercera fue la vencida: sobre el cierre, Murillo, con un lindo gol,  estiró la diferencia.

Argentina, por su parte, dependió mucho de lo que hiciera Messi, quien pocas veces se pudo desprender de la marca pegajosa que tuvo. Cuando lo logró, Argentina lastimó. Primero, con un cabezazo de Martínez, y luego con un remate del 10.

Los cambios que hizo Scaloni parecían darle otro aire al equipo argentino, pero no fue así. Y con el correr de los minutos, se diluyó por completo. Ni el descuento de Lautaro Martínez, a los 13 minutos, pudo cambiar la historia.

Al equipo nacional, más allá de alguna chance, le costó mucho llevarse puesto a su rival y Venezuela, cuando tuvo su oportunidad, no perdonó y liquidó el pleito. Eso se produjo a los 28 minutos cuando Josef Martínez, de penal, aprovechó la falta que le cometió Foyth dentro del área y puso el 3-1.

Así, con una dura derrota,  Argentina se llenó de duda a meses de la Copa América.