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CRECA, la historia de un club que se salvó de la privatización gracias a los socios

SU HISTORIA. El Centro Recreativo Encuentro Con Amigos, en Temperley, evitó la situación delicada y hoy brilla con sus actividades, a la espera de la temporada de verano.

La localidad de Temperley cuenta, en una de sus manzanas, con el Centro Recreativo Encuentro Con Amigos, un club que supo ser un pequeño jardín botánico y que luego pasó a ser un espacio para ser utilizado por el personal civil de la Fábrica Militar. La institución pasó por momentos delicados y hasta evitó la privatización, en la presidencia de Carlos Menem, gracias al enorme esfuerzo de los socios de aquel entonces. Marcelo Morra es uno de los socios más antiguos del club y le contó al Diario La Unión la historia del lugar, el trabajo de las personas que lo integran y cómo se sobrepusieron a la pandemia, mientras esperan la llegada de la temporada de verano y la visita de cientos de vecinos.

Originariamente, el club se llamaba Elaboración del Cobre y sus aleaciones (ECA), ya que era usado para la recreación del personal civil de la Fábrica Militar que se encontraba muy cerca del Puente Victorino de la Plaza. Luego, algunos socios compraron las instalaciones y lo renombraron como Encuentro Con Amigos para mantener la sigla. Al armarse una sociedad civil sin fines de lucro, el nombre volvió a sufrir una modificación y pasó a llamarse CRECA: Centro Recreativo Encuentro Con Amigos.

LA IMPORTANCIA DE LOS SOCIOS

"Si nos rememoramos a la historia, aquí hubo una quinta y después un jardín botánico, ya que actualmente existen árboles no tradicionales que fueron plantados en el lugar. Cada especie tiene un letrero con su nombre", contó Marcelo Morra, que para muchos amigos es el socio más antiguo, ya que sus padres lo eran y prácticamente nació en el club. Rápidamente agregó: "También había animales sueltos en una especie de montaña y una cascada que fueron armados en este lugar".

En la presidencia de Carlos Menem, la fábrica fue privatizada y el centro de recreación corría la misma suerte, pero un grupo del personal civil puso un interdicto que posibilitó que el club quedara en sus manos.

"En la presidencia de Carlos Menem, la fábrica fue privatizada y el centro de recreación corría la misma suerte, pero un grupo del personal civil puso un interdicto que posibilitó que el club quedara en sus manos", rememoró Morra sobre uno de los momentos más delicados en la historia de CRECA. "Con el pago de una suma en dólares y la lucha de varios años, logramos dejar en Lomas un club que pertenece a todos los socios", enfatizó Marcelo, orgulloso con esa gestión y de haber podido salvar a la institución.

Alrededor de cien familias trabajaron con mucho esfuerzo para lograr ese objetivo: varias rifas y bailes, entre otras actividades, les permitieron juntar ese dinero que les requerían para evitar la privatización.

PRESENTE Y PANDEMIA

CRECA actualmente cuenta con aproximadamente 600 socios. Pese a ser un club pequeño en comparación a otras instituciones, eso les permite ser una "familia" entre los integrantes de la institución que se encuentra en la calle Colón, entre Esmeralda y Anchorena.

El deporte estrella es el tenis y tenemos seis canchas. Pero también hay muchísimas actividades, como fútbol, hockey y natación.

"El deporte estrella es el tenis y tenemos seis canchas. Pero también hay muchísimas actividades, como fútbol, hockey y natación", contó Marcelo. Los juegos de mesa, en el buffet del club, también son muy codiciados y entretienen a los socios.

La llegada inminente del verano, en medio de la pandemia, puso a trabajar a CRECA con protocolos para que se pueda disfrutar de las instalaciones en los meses de diciembre, enero, febrero y marzo. "La Municipalidad nos brindó una serie de recomendaciones para que se pueda usar la pileta. Trabajamos para que el predio no se llene y se cumpla con el distanciamiento", detalló el socio de 65 años, que sabe que varios vecinos no se irán de vacaciones y aprovecharán los fines de semana para acercarse al club.

En medio de la pandemia, puso a trabajar a CRECA con protocolos para que se pueda disfrutar de las instalaciones en los meses de diciembre, enero, febrero y marzo.

Con vistas a futuro, la comisión directiva tiene mucho entusiasmo para poder volver a tener deportes como básquet, vóley y handball. "Otro gran proyecto es poder armar un gimnasio para estas actividades, con el objetivo de integrar a más chicos y grandes, vecinos de Lomas".

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