La historia de Andrea Huenchupan, la primera jugadora trans de Los Andes

Andrea Huenchupan tenía en claro lo que quería, cuál era su deseo y el sueño que tenía por cumplir. Y luchó por conseguirlo. Nada la corrió de su camino. Y en ese andar, derribando todas las barreras que aparecían, logró algo histórico: se convirtió en la primera futbolista transgénero habilitada por AFA para jugar el torneo oficial  de futsal.

El debut se concretó hace dos semanas y lo hizo con la camiseta de Los Andes, el club al que llegó en octubre de 2021 y con el que se mostró "muy agradecida" porque fue el que le "abrió las puertas" para poder contar su historia. Y en este pequeño hecho, Andrea -de 42 años- derribó el muro de la marginalidad, rompió con lo establecido y aportó su granito en la lucha del colectivo LGBT.

"La verdad que estoy muy contenta, el deseo que tanto quería se cumplió y ahora lo estoy disfrutando. Siempre busqué que el cambio de género y el amor que tengo por este deporte puedan ir de la mano y haberlo lograrlo, me emociona mucho", remarcó en una charla con Diario La Unión.

El fútbol, para ella, ocupa un lugar "muy importante", lo practica desde los 4 años y por eso se sentía incompleta cuando no podía unirlas, más allá de que la Ley de Identidad de Género, aprobada en julio de 2012, establece que la identidad autopercibida debe respetarse en todo ámbito, incluido el deporte.

El camino, por ende, fue largo y de varios obstáculos, pero la primera lucha fue interna. "En un momento tenía una idea errónea, ponía en la balanza mi deseo de jugar al fútbol con mi elección de cambio de género y estaba equivocada. Hasta llegué a pensar en elegir por una de las dos. Por suerte, con el tiempo, me di cuenta que no tenía que elegir y cuando entendí que podían ir de la mano, todo cambio", comentó.

"En ese momento no hablé del tema y fue un error. Si me hubiese abierto, seguramente abría los ojos mucho antes. Haberme quedado con esa duda no me hizo bien. Recién cuando pude unir mis dos deseos, me sentí liberada", subrayó, mirando hacia atrás.

Las conquistas conseguidas en los últimos años, más los triunfos que se lograron a partir de la ley, fueron un motor para que Andrea no baje los brazos y se anime a cumplir sus sueños, como antes lo hicieron Mara Gómez -la primera futbolista trans profesional de la Argentina-, Tiziana Lezcano y Jezabel Carranza, entre algunos ejemplos. Y con gran pasión, cumplió su propósito.

Hace nueve años que estoy en esta batalla y por suerte, de a poco, se van logrando cosas. Hoy me siento súper segura

"Si bien siempre me enfoqué en mis deseos y en poder hacer las cosas sin culpa, alguna debilidad por el pensamiento ajeno tuve al principio y creo que el contexto, con el paso de los años, fue ayudando para que muchas nos animemos. No hubiese sido lo mismo tomar la decisión cuando tenía 18 años y jugaba en el plantel de primera de Comunicaciones que hacerlo ahora. Yo hace nueve años que estoy en esta batalla y por suerte, de a poco, se van logrando cosas. Hoy me siento súper segura", señaló.

Esa experiencia, justamente, le permite ver todo con otros ojos, sabiendo que los sueños se cumplen y que los deseos, si se los persigue, se convierten en realidad. "No sirve de nada guardarse o quedarse escondidos por miedo a… Eso no va. Hay que hacer lo que uno tiene ganar e ir por eso que le hace bien y le gusta", recalcó.

Y concluyó: "La vida es una sola y hay que disfrutarla de la mejor manera. Hay inconvenientes, es verdad, pero la vida hay que disfrutarla. Y en mi caso qué más lindo que jugando al fútbol, que es lo que más me gusta hacer".